Reapareció, junto a su bancada menos con Kenji. Dice que estudia demandar a fiscal de la Nación y cuestiona investigación contra ella usando la Ley de Crimen Organizado.

Por Henry Cotos Campeán

Keiko Fujimori reapareció públicamente para amenazar con tomar acciones legales contra el fiscal José Domingo Pérez que la investiga por supuestos aportes irregulares que habría recibido en la campaña presidencial de 2016, señalando que el accionar del representante del Ministerio Público “ha sobrepasado los límites”.

 

Olvidándose que a través de su bancada promovió acusaciones sin mayor sustento contra sus rivales y protegió a los miembros de su bancada pese a la evidencia de irregularidades, sostuvo que “nuestra defensa legal está tomando las medidas necesarias contra un sector parcializado del Ministerio Público, he sido muy cauta y paciente todo este tiempo, pero ya sobrepasaron el límite. Investiguen lo que quieran, pero sin abusos”.

Excandidata rechaza presencia de fiscal José Pérez.

Cocteles

Acompañada por los congresistas de su bancada parlamentaria, la hija del reo Alberto Fujimori no se pronunció respecto a los supuestos donantes de 4 millones de dólares a su campaña a través de los famosos cocteles, pero sí dijo que “siempre he dado la cara y lo seguiré haciendo, porque ni el partido Fuerza Popular, ni mi esposo Mark somos una organización criminal”.

Sobre los cocteles que, según ella, le permitieron financiar su campaña electoral, dijo que “fueron públicos y los periodistas los transmitieron en vivo”, como si los periodistas hubieran tenido acceso a las cuentas en señal de transparencia, y volvió a cuestionar al Ministerio Público por haber determinado que su caso ya no sea visto por el fiscal Germán Juárez Atoche, sino por José Domingo Pérez.

En lo que podría ser una interferencia en la administración de justicia, la excandidata, que fue derrotada por Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski, se atrevió a poner en duda las decisiones de la Fiscalía al manifestar que “no quiero pensar que lo han puesto (a Pérez Gómez) para ampliar los plazos y para montar un show mediático de allanamientos y otras acciones”.

Se queja

Demostrando no saber que la Fiscalía puede abrir una investigación cuando existen nuevas pruebas o evidencias de ilícitos, Keiko acusó al fiscal Pérez de desconocer una resolución de Juárez, en la que “este último expresamente señalaba que no calificábamos como una organización criminal”.

Tratando de victimizarse dijo que “como peruana, siempre he colaborado con la justicia y lo seguiré haciendo. En los últimos 16 años vengo siendo investigada. He asistido por lo menos 10 veces a la Fiscalía, 4 veces a comisiones investigadores en el Congreso, 5 al Poder Judicial y 3 a la Policía Nacional”.

Pese a que tiene a su padre en prisión por corrupción y muchos de sus tíos son prófugos de la justicia (también por corrupción) y están refugiados en el Japón, aseguró que ella, su familia o su partido no conforman una organización criminal y aseguró que “no es cierto que he evadido citaciones. Una cosa es pedir una reprogramación y otra muy distinta es no declarar”.

Sus procesos

Sobre las cuatro investigaciones preliminares contra ella en el Ministerio Público: por la campaña del 2011 iniciada en octubre del 2015, cuestionó que el expediente haya pasado al despacho del fiscal José Domingo Pérez. “En Fuerza Popular no hay nada que temer. No hay agendas, no hay enriquecimiento, no hay delitos. Todo está reportado y todo está debidamente bancarizado”, insistió.

Respecto a la campaña del 2016; iniciada en marzo de ese año por las anotaciones en la agenda de Marcelo Odebrecht “aumentar a Keiko 500 y yo haré visita”, recientemente iniciada; señaló que no hubo visita, ni entrega y, en todo caso, no es su tema si se trató de un proyecto o inversión.

“Estamos dispuestos a colaborar con la justicia y asistiré las veces que sean necesarias, porque jamás hemos recibido un aporte de dicha empresa”, afirmó.

Sobre el caso Ramírez, cabe recordar que un informe periodístico afirmó que el Departamento Antidrogas de Estados Unidos (DEA) investigaba una grabación entregada por el ciudadano Jesús Vásquez, en la que supuestamente se escucha decir al ex hombre fuerte del partido que Keiko Fujimori le habría entregado US$15 millones para lavarlos para la campaña del 2011, y que él lo habría hecho a través de una cadena de grifos.

Keiko la emprendió contra el fiscal de la Nación Pablo Sánchez.

Destaca a Sara Vidal

Al respecto, Keiko dijo que el audio no existe y que la investigación empezó con un correo electrónico anónimo en el 2014. En ese sentido destacó la decisión de la fiscal Sara Vidal de archivar la pesquisa preliminar, pese a que generó una serie de cuestionamientos por parte de juristas y especialistas que consideran que hay suficientes indicios para seguir con la investigación.

La excandidata que ha pedido una dura sanción contra su hermano Kenji, la volvió a emprender contra el Ministerio Público. “Como al señor fiscal de la Nación, Pablo Sánchez, no le gusta el fallo, ahora él sale a decir que va a evaluar la actuación de la fiscal Sara Vidal. ¿Eso no se llama intromisión? ¿Qué se pretende, sancionar a una fiscal que ha cumplido con su deber? O peor aún, ¿presionar a esta y a otros fiscales?”, declaró.

Algo más

Keiko evitó pronunciarse sobre la situación de su hermano Kenji y sobre el indulto al reo Alberto Fujimori.

 

Diario Uno, 07.10.2017