La compra de repuestos y componentes mayores para helicópteros Mi-25 y Mi-35 de la FAP a la compañía ucraniana Ukrinmash fue la gota que colmó el vaso en la Agencia de Compras de las Fuerzas Armadas (ACFFAA).

La empresa Ukrinmash está comprometida en una trama de suministro presuntamente ilegal de armamento a Sudán del Sur, un país africano sumergido en una brutal guerra civil, de acuerdo con un reciente reporte de la organización Amnistía Internacional que monitorea las violaciones a los derechos humanos durante el conflicto. A poco de haber alcanzado la independencia, el gobierno de Sudán del Sur enfrenta una sangrienta guerra con los rebeldes del Ejército de Liberación del Pueblo de Sudán que busca desalojar del poder al presidente Salva Kiir, quien ejerce desde 2005.

Ucrania no es fabricante de los helicópteros Mi-25 y Mi-35 y Ukrinmash no cuenta con la licencia de ventas de equipos, repuestos u otros servicios por parte del Servicio Federal de Cooperación Técnico Militar ni de Tecnologías de Rusia, el organismo que aglutina a los fabricantes de helicópteros rusos.

No es la primera vez que la ACFFAA adjudica el suministro de repuestos de helicópteros rusos a compañías que no son fabricantes y que mucho menos han recibido la autorización de los productores originales.

El último 14 de octubre, la ACFFAA tuvo que anular la buena pro que había concedido a la empresa Rukh Aero Power Corporation, con sede en Miami, Estados Unidos, para el suministro de repuestos de helicópteros Mi-117-Sh-P. La decisión fue tomada luego de que la prensa revelara que dicha firma carecía de validación de la fábrica de las aeronaves.

Diferencia de precios

En distintas comunicaciones a las autoridades peruanas, la representación rusa ha alertado sobre la proliferación de empresas que ofertan bajos precios de equipos, armamento, aeronaves y munición de todo tipo, pero que no tienen la licencia correspondiente de los fabricantes; por lo tanto, advirtieron que no se hacen responsables de las consecuencias.

Sin embargo, recientemente, el 14 de noviembre, el Comité de Contrataciones en el Mercado Extranjero de la ACFFAA dio por consentida la propuesta de Ukrinmash para el suministro de repuestos de helicópteros Mi-25 y Mi-35 de la Fuerza Aérea del Perú. No se tomó en cuenta la alerta de la fábrica de dichas aeronaves ni tampoco la información que relaciona a la firma ucraniana con la triangulación de armamento.

La adjudicación de la compra de repuestos para helicópteros de fabricación rusa lo hizo el Comité de Contrataciones en el Mercado Extranjero, una dependencia de la ACFFAA. Pero la adquisición se ejecuta según los criterios técnicos definidos por el usuario, en este caso, la FAP.

En el proceso participó la compañía S.A. Helicópteros de Rusia que, como se ha indicado, representa al fabricante de las aeronaves Mi-25 y Mi-35, pero fue descalificada porque ofertó un monto superior al precio referencial.

Nueva disposición

El precio referencial lo fijó la Dirección de Estudios de Mercado de la ACFFAA, en función de los requerimientos de la FAP, y debió diferenciar entre los precios del fabricante y de los que venden repuestos de procedencia sospechosa.

Tomando en cuenta eso, eligieron la oferta de Ukrinmash sin tomar en cuenta que esta empresa no es fabricante, no es representante autorizado ni tampoco ha presentado evidencia de que los productos que ofertan sean originales. Por eso ofertó un precio más bajo en relación a lo que pidió la empresa rusa.

Debido a estos incidentes, las autoridades de la Agencia de Compras de las Fuerzas Armadas han resuelto que a partir de este lunes todos los procesos de adquisiciones deberán contar con el precio referencial obtenido de los fabricantes y requerir a los proveedores las respectivas licencias del productor original de los equipos.

Para asegurar la transparencia de las adquisiciones de equipamiento del Sector Defensa, la ACFFAA también ha solicitado a la Contraloría General de la República el acompañamiento de sus especialistas en los procesos con la finalidad de detectar eventuales irregularidades, incluso antes de la suscripción de los contratos.

Triangulación ilegal de Ucrania a Sudán del Sur

El 25 de setiembre último, la organización Amnistía Internacional lanzó al mundo un informe que destapa que una pequeña empresa basada en Londres, S-Profit, desde 2014 actuó como intermediaria en la venta de armamento de la compañía ucraniana Ukrinmash al Ministerio de Defensa de Sudán Sur, sumergida en una guerra civil.

Ukrinmash acaba de ser contratada por el Estado peruano para la provisión de repuestos de helicópteros Mi-25 y Mi-36.

“Los documentos comerciales nombran a S-Profit Ltd como el ‘proveedor’ en un acuerdo para proporcionar al menos US$ 46 millones en armas pequeñas, armas ligeras y municiones para el gobierno de Sudán del Sur”, dice el informe.

 

La República, 20.11.2017