Vladimir CerronVladimir Cerrón. La población del Perú demanda una Nueva Constitución 

Entrevista: Fidel Gutiérrez y Susana Mendoza

Usted se define como un político de izquierda, ¿por qué no se sumó a una agrupación de izquierda y eligió estar solo?

–Para el colectivo en general, todas las izquierdas se parecen, pero tenemos diferencias sustanciales. Por ejemplo, con el Frente Amplio nos diferencian muchas cosas; primero, que es una izquierda capitalina y nosotros somos una izquierda provinciana. Además, ellos son una izquierda financiada por USAID; nosotros no tenemos ese financiamiento extranjero. Ellos no promueven el cambio generacional de la política, aparte de la candidata, mientras nosotros creemos en un cambio generacional de las ideas.

–¿Por qué quiere ser presidente del Perú?

–Porque como gobernador regional vi que las facultades para los pueblos del Perú profundo de querer desarrollarse encuentran una traba. Todo gobierno regional tiene limitaciones para querer hacer grandes obras. Entonces, uno ve la necesidad de llegar a más rangos de poder con el fin de resolver los problemas.

Por ejemplo, están los conflictos internos, con las comunidades y por la contaminación medioambiental, que en Lima no entienden y por eso no se toma una decisión adecuada.

–¿Cuál fue el principal aporte que dejó a Junín durante su gestión al frente del gobierno regional?

–Para mí ha sido una buena experiencia el gobierno regional de Junín, en el que pudimos ver que el manejo del Estado no es tan complicado ni tan difícil, simplemente hay que manejar bien la ética y la moral respecto al presupuesto, que es el gran problema en el que pueden haber caído muchas autoridades.

–¿Qué es lo mejor que hizo en su gestión?

–Trabajamos el tema de la salud pública. Gestionamos cuatro hospitales especializados; impulsamos la telemedicina; formamos especialistas; tuvimos el programa Médico de la Familia, consistente en un galeno para cada 2,500 habitantes en los asentamientos humanos, donde les construimos su consultorio y, en el segundo piso, su vivienda. Así, este médico era un nuevo miembro de la comunidad y ayudaba a prevenir las enfermedades. Hicimos 47 consultorios para atender a cerca de 100,000 moradores.

–A escala nacional, ¿ qué planteará en el tema de la salud pública, un asunto que conoce por su misma profesión?

–Hay muchas cosas que mejorar en salud pública. Por ejemplo, abogamos para que haya un solo sistema de salud pública que atienda a todos los peruanos y se acabe con la discriminación en este tema.

Esto permitirá luchar contra la corrupción enquistada en Essalud, por ejemplo, que maneja cerca del 7% del presupuesto de la República y brinda una atención deficiente para el 19% de los peruanos.

En cambio, el Ministerio de Salud (Minsa) cuenta con un presupuesto que es menos del 1% y atiende al 80% de los peruanos. En tal sentido, creemos que hay muchas cosas que mejorar y por las cuales abogar para que en cada región existan los hospitales especializados. Es importante.

Por ley, todas las regiones deberían contar con un hospital materno-infantil y no lo tienen. Solo hay nosocomios generales que hacen de todo y a la vez nada. Es necesario especializarlos porque ahí formas a los especialistas en pediatría, ginecología y demás ramas, que es el problema de las provincias, donde solo tienen el 25% de los especialistas, porque el 75% está concentrado en Lima.

Necesitamos que los hospitales no solo sean centros de asistencia, sino también de docencia e investigación para resolver este tema de la falta de recursos humanos.

–Durante su gestión, ¿qué hizo con los recursos del canon minero?

–Con el canon minero pudimos construir hospitales, fundamentalmente; cada nosocomio vale un aproximado de 150 millones de soles. También se hicieron puentes y levantamos el primer museo de la memoria completo en todo el Perú. Entonces, cuando hay voluntad política, sí se pueden hacer las cosas, no hay mayores pretextos.

–¿Qué plantea para equilibrar las inversiones en el sector energético con las necesidades de las comunidades?

–En mi gobierno regional solo se atendió un proyecto minero importante, el de Toromocho. Emitimos la Ordenanza Regional Nº 108, que declaraba de interés la minería, pero a la par planteamos que la empresa asumiera compromisos con la región.

Le dijimos que más del 60% de los trabajadores debían provenir de la zona; que las comunidades tenían que ser accionistas con el 1%; que las comunidades debían participar también en el reparto de las utilidades, y no solo la transnacional y el Estado; que comprara todos los insumos en la región para que se generara economía; que respetara la consulta previa con carácter vinculante…

–¿Y qué pasó?

–El procurador nos impugnó y llevó al Tribunal Constitucional (TC), que nos dio la razón, excepto en el tema de la consulta previa, porque nosotros emitimos esa ordenanza antes de que el Congreso tocara este tema y nos dijeron que nos adecuáramos. Y al adecuarnos, ese carácter vinculante no existe en la ley.

Esto mejoró bastante las relaciones, aparte que Toromocho está ubicado a 4,400 metros de altura y no hubo conflictos.

–¿Qué hizo usted para proteger el medioambiente en Junín y así contrarrestar los riesgos de la actividad minera?

–La ordenanza Nº 108 habla también del medioambiente y del PAMA [Programa de Adecuación y Manejo Ambiental]. Nosotros impusimos multas a varias mineras para que no contaminaran más el río Mantaro. Ellas apelaron a Lima y las absolvió el Ministerio de Energía y Minas. Esta es una necesidad que me obliga a ver si puedo llegar a un puesto más alto para poner las cosas en regla.

–¿Y cómo empezará a poner las cosas en regla, como usted dice, en la actividad minera?

–Las empresas mineras están en toda la capacidad económica de cuidar el medioambiente, lo que sucede es que no quieren hacerlo. A veces, prefieren utilizar el agua dulce de los ríos, en vez de desalinizar el agua de mar. Ese problema se presenta en las regiones Moquegua y Arequipa.

Además, en este momento, el reparto de utilidades se está haciendo de manera inadecuada. Por ejemplo, las mineras que más ganan en el Perú, que son Southern, Corporación Cerro Verde y Shougang, se están llevando el 70% de las utilidades y dejan al Perú solo el 30% restante. Con ese 70% les alcanza para cuidar mucho más el ambiente.

Sin embargo, estamos planteando que esto se renegocie y se invierta la proporción, es decir, que al Perú le toque el 70% y a ellos el 30%. En Bolivia son más radicales, pues se quedan con el 82% de utilidades y las transnacionales con el 18%, y con todo esto les es negocio.

–¿Se van a revisar los contratos, entonces?

–Tenemos que revisar los contratos porque todos se han hecho de manera fraudulenta y lesiva al Estado. Por eso, se hace necesaria una Asamblea Constituyente que elabore una nueva Carta Magna.

–¿Y cómo lograr esta convocatoria a una Asamblea Constituyente?

–El Presidente de la República tiene toda la facultad de convocar a un referendo. La pregunta sería la siguiente: “¿Está usted o no de acuerdo con que se convoque a una Asamblea Constituyente en aras de hacer una nueva Constitución Política del país? Sí o no”.

Estoy seguro de que va a ganar abrumadoramente. Y una vez ganada se hará el reglamento de la Asamblea Constituyente en el que los sectores [como magisterio, médicos, empresarios] elegirán a sus constituyentes. No solo los partidos políticos deben hacer la nueva Constitución.

–¿Qué tan preparado está nuestro terreno político para experimentar este tipo de propuestas?

–Como candidato que ha recorrido el Perú, sobre todo la zona centro sur, esta última con más fuerza, el pedido unánime del país es una nueva Constitución Política porque se ha visto que las naciones vecinas han mejorado su economía de una manera notable. (PBQ)

Programas sociales

El candidato presidencial de Perú Libertario manifestó que mantendrá los programas sociales que se ejecutan en el país, pero “les pondría una fecha de caducidad. No pueden ser indefinidos”. Mientras se desarrolla un plan de este tipo, aseveró, el Estado debe ir resolviendo las causas que generaron la necesidad de que se implementara este apoyo.

Vladimir Cerrón puso como ejemplo el programa del Vaso de Leche y sostuvo que en 35 años de su vigencia ya se debieron solucionar los problemas que motivaron su puesta en marcha. En otro momento, el aspirante expresó la necesidad de que el Perú entre en una fase de industrilización, cuando menos incipiente, en todos los sectores de la economía nacional. Propuso formalizar los rubros, decretar una amnistía tributaria, reducir el impuesto a la renta, renegociar los tratados de libre comercio (TLC), es decir, impulsar una “política para fortalecer la industria nacional y así generar más puestos de empleo”. Los mineros y empresarios informales deben regularizar su situación y los cocaleros empadronarse, agregó.

Temas

Vladimir Cerrón dijo que la Asamblea Constituyente tiene que debatir el retiro del Perú de la competencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, a fin de implementar la pena de muerte para casos de homicidio calificado, narcotráfico, corrupción política y traición a la patria.

Se mostró contrario a la intervención de las Fuerzas Armadas en las tareas de seguridad ciudadana, pues —precisó— no están preparadas para esa labor.

El Peruano, 27.01.2016

https://youtu.be/cl6n-CPFAGU