Inexplicablemente, pese a que el metabolito encontrado en las muestras de análisis del capitán de la selección peruana de fútbol, Paolo Guerrero, proviene de un mate que tomó y a que la sustancia no lo ayudó en su rendimiento físico, la Comisión Disciplinaria de la FIFA suspendió al delantero peruano Paolo Guerrero por un año, en un proceso que se le sigue desde noviembre por un resultado analítico adverso obtenido de un control de sustancias prohibidas tras el partido ante Argentina en Buenos Aires el 5 de octubre.

 

paolo guerrero

Esta sanción es sospechosa, pues ante la evidencia de que se trata de un caso menor, recibe una sanción desproporcionada de un año, lo cual le impediría participar en el Mundial de Rusia 2018. Todo parece indicar que la destitución de personajes corruptos en la FIFA ha sido insuficiente.

Como se recuerda, el jugador peruano dio positivo por el metabolito de la cocaína benzoilecgonina, una sustancia incluida en la Lista de Prohibiciones de la AMA 2017 en la clase "S6: estimulantes".

No contó para los jurados la prueba realizada en una muestra del jugador, que concluye que no utilizó la droga cocaína, lo cual confirma que las moléculas detectadas provienen del mate que tomó contra la gripe.

Al haber dado positivo por una sustancia prohibida, indicó la FIFA, el futbolista ha contravenido el artículo 6 del Reglamento Antidopaje de la FIFA y, en consecuencia, el artículo 63 del Código Disciplinario de la FIFA.

El periodo de vigencia de la suspensión comienza el 3 de noviembre de 2017, fecha en la que el jugador fue suspendido de manera provisional.

De conformidad con el artículo 29 del Reglamento Antidopaje de la FIFA, la suspensión incluye, entre otros, todo tipo de partidos en el ámbito nacional e internacional, amistosos u oficiales.

La decisión de la Comisión Disciplinaria de la FIFA fue notificada en la víspera, según precisa la información del máximo ente del fútbol internacional.

El 30 de noviembre, Paolo Guerrero se defendió en una audiencia ante la FIFA, en Zurich, junto a sus abogados y un bioquímico, luego de la cual el jugador informó que había quedado claro que en su caso no hubo consumo de cocaína.

Con la sanción de la FIFA, el delantero nacional se perdería el Mundial Rusia 2018, que se jugará entre junio y julio del próximo año.

La defensa legal del jugador anunció que apelaría la sanción.