“Florencia”

Tu cándida y pura mirada no sabe de odios ni males que aquejan el alma
brindas tu amor más puro sin miedo a entregarlo.

Muestras tu sinceridad e inocencia que acompañan a la experiencia,
el saber sin temor, eres la flor que riega los sentimientos más puros.

El temblor de tus manos te hacen más tierna,
tu blanco rostro parece el de un ángel
que espera ver cielo en las noches.

Has cambiado de figura, se ha reducido tu tamaño,
pero sigues mirando hacia adelante
ya no caminas como antes, ahora solo descansas.

Sabes que el tiempo pasa, y sí que pasa, pero tu alma no cambia, sigue intacta recorriendo los vientos más bellos allí en los eternos cielos.

Tu retrato está grabado en mi mente y me hablas en mis sueños,
recuerdo siempre que decías
no llores por mí, a veces eso es difícil cumplir.

Todas tus historias fueron parte de mí inquieta mirada
que esperaba escuchar todas las noches tus mágicos relatos.

Ese canto melodioso, de registro soprano, agradable al oído,
La creatividad infinita que mostrabas, y a pesar de estar cansada seguías.

Tus pellizcones juguetones, la paciencia que tenías para atenderme,
la sonrisa que mostrabas al verme.

En un mal tiempo las cosas se invirtieron,
ahora yo te atendía,
ahora yo te narraba,
ahora yo te cantaba,
ahora yo te acostaba.

Un día te visité en ese lugar donde todos visten de blanco y caminan de un lado para otro, donde suenan las ambulancias, donde la gente llora por sus seres queridos.

Tu mirada había perdido la dirección, tu voz era apagada, no soportaba verte así, solo te abrazaba pero tú no me reconocías.

El día de tu adiós fue un silencio amargo y triste, un dolor acompañado con tu rostro y tu voz, fotografías oscuras.

Después de esos días negros, opacos, te quedaste siempre contándome cómo estás
me alegra verte de nuevo, aunque sea solo en mis sueños

Florencia.

 

“Tu anatomía”

Tu lóbulo occipital pudo captar todos mis tonos
el rojo rosa en la cabeza y mi vestido lleno de flores.

La epidermis de mi piel renuncia a dejar tu sudor continuo
el esmalte de mis dientes buscan tu atención
tu globo ocular realiza los más bellos movimientos
y busca los míos para generar el amor en melodía.

Tu lóbulo temporal pudo escuchar mi inquieta voz
como cantos angelicales que se unen con fruición.

Mi húmero y mi radio solo quieren reposar en tus pectorales
cuando estamos juntos nuestros hipotálamos explotan la temperatura
poco a poco vamos juntamos los orbiculares
de nuestros labios sabiendo adónde nos llevan.

Tu lóbulo parietal pudo llenarse
de mis recuerdos
más locos, más tiernos
más extraños que estos versos.

La sístole y diástole de nuestros corazones
son una bomba de tiempo
con tanto amor que tenemos podemos romper el miocardio
tu fémur cae suavemente sobre el mío todas las noches
yo me aferro a tus acromiones para percibirte.

Tu lóbulo frontal pudo descubrir todas mis inquietudes
las erradas, las correctas, las que rigen mis acciones.

Tu columna vertebral solo se mueve hacia una dirección
yo te espero, nos tocamos y aumenta la adrenalina
tus falanges juegan con mis maseteros sonrojando mis mejillas
proyectamos el mismo latido, nuestras aortas ahora están unidas
el amor cada día crece en estallido.

 

“Esperanza”

Oh esperanza mía no te alejes de mí al menos déjame contemplarte como lo hacía feliz con mi rostro abrazado de luz, tal vez para ti es fácil volar por muchos horizontes pero yo aún te necesito.

Oh esperanza mía tú eres la única que nace desde una chispa incendiada en mi corazón, conoces mis carreras, no te alejes yo estoy tratando de alcanzarte pero tú te alejas sin decir adónde vas.

Oh esperanza mía no espero aburrirte con mis suplicas, sabes bien que mi corazón moribundo quedará si tu llama ya no calienta mi alma, ahora entiendo cuando amenazabas arribar para no volver.

Oh esperanza mía me he puesto de cómplice con el viento para no dejarte ir tan fácilmente, que quieres que haga para convencerte, tus huellas las sigo pero a veces me pierdo déjame el rastro más escandaloso para dar contigo.

Oh esperanza mía, no he dudado de ti solo me he perdido un tiempo, tú guías mis líneas coordinadas, yo solo quiero encontrarte, ¡no  me digan nada no me interrumpan!, que cuando mi esperanza decida no escapar yo sonreiré de nuevo.

Oh esperanza mía, ayer visité tus entradas como siempre me cautivaste pero te ruego no te vayas yo reconozco que te he descuidado pero no estoy pidiéndote nada a cambio solo quiero que estés cerca.

 

“Mi niño”

Tus ojos son los mares más tiernos
que he podido contemplar
en medio del invierno.
Tus pestañas peinan el aire perfumando
Como plumas gigantes que acarician
Mis pupilas rosadas.
Tus labios contienen el cielo y el infierno
queman como una lava sin producir daño,
solo tú desatas mi paz y mi pasión.
Me guías tranquila y feliz por los planetas
del amor enamorado.
Te amo porque eres mi niño, mi ápice,
mi verano, mi invierno, todo mi ser.
Tu pecho brinda cobijo a mi corazón
como un amor inquieto cual aleteo de un pez.
Tus brazos me  protegen como cual gigante
protege a su pequeña, de modo desafiante.
Me haces sentir colores inventados dentro del amor,
la paz, la felicidad, la vida.
Tu corazón enamorado guarda el mío en la torre Eiffel
llena de cristales que jamás se rompen.
Tus fuertes manos sonrojan mis mejillas tibias
guardo tu corazón en mi universo de cristales
que jamás se van a romper.

 

“Días”

Todas las milésimas de tiempo vertidas en una taza de té y yo con mucha fe me aferro a no irme, tantas cosas han pasado que mis pasos bien marcados quieren salir corriendo y aunque aún conservo la energía para quedarme la herida es bien penetrante.

En constante camino silencioso y agonizante estoy caminando, no me estás iluminando para poder esperarte, es que acaso nuestras razones ya no son suficientes para nuestros corazones.

Oh es que acaso tal vez nuestras aventuras ya no son suficientes para nuestras locuras, todavía tenemos oportunidad lo crees tú así, yo no quiero desvanecerme, ayúdame para no querer perderte.

Con solo miles de besos tuyos podría salir de esta cárcel del alma que debe reaccionar para poder ser salva, tu amor hará crecer mi corazón y mi piel se llenará de emoción.

Vámonos por el indicado principio y final, dejemos  el suplicio y el mal, corramos por las lluvias del amor, felices, riéndonos de esta sombra dolorosa que opaca nuestros corazones.

 

“Las calles de mi cuarto”

Caminos oscuros perpetuos de muerte
lúgubre me siento
por siempre por siempre.
No cuento los días, no cuento las horas,
la voz disfónica me ata a la bestia escondida.

Recuerdos espejos negros que transforman mi ira,
las calles de mi cuarto,
sin salida sin salida.
Demonios que se acercan me besan la frente
detienen el tiempo como un reloj inerte.

Arañas desnutridas transitan mis pensamientos
tejen mi muerte sin suerte
encadenamientos encadenamientos
Miradas inconscientes sin ojos
destapadas de odio, soledad y muerte.

Aterrado en este encierro
Sin poder escapar del genio
Asfixiante de negras noches
solo me aferro al despertar de
algún final oscuro.

 

“Pasión”

Pasión que mata los más recónditos deseos,
golpeas fuerte las maravillas de mi cuerpo,
me sometes a ti sin compasión y
floreces con fervor los besos a cien grados.

Conoces mis puntos más alterados
de la melodía de mi cuerpo,
me encierras en una batalla que tú vas a ganar,
bailas en las sabanas conmigo.

Las más bellas flores se opacan
con nuestra pasión,
los más ocultos secretos se revelan
con nuestra pasión.

Caminas en mis lados más salvajes
y canto en tus lados más ocultos.
Concretas mis emociones de deseos
Amorosos para ti.

Friccionamos nuestras almas
       /salidas de un volcán
caminando sin saber adónde nos conduce
       /el fuego que generamos,
seguimos sin titubear.

Corremos juntos por el túnel complejo
      /de enigmas apasionados.
Anclas en las salas repletas
       /de aroma a miel
manejamos por los desvíos
/calcinados de pasión.

Consigues triturar las inquietudes
       /de mis piernas.
colocas en la cima más alta
     /nuestro escondite
para así convertirnos
    /en la crema más picante,
me deslizas lentamente
    /por el manantial de amores.

 

Fiorella Linda Gutiérrez Lupinta (Lima, 1985). Bachiller en Terapia de Lenguaje (UNFV). Estudió Enfermería Técnica dos años (Instituto Superior Tecnológico Santa Rosa). Ha realizado talleres de voz para teleoperadores, profesores y personas de la tercera edad. Cantante, actriz, escritora y poeta. Actualmente termina sus estudios de teatro en la AAA y se dedica a desempeñarse como terapista, animadora, actriz, realiza cortos, escribe obras cortas de teatro, además de participar en recitales poéticos. Fue invitada al programa Caras de la Cultura, de Manuel López Rodríguez para hablar de su poesía. Su poema “Silencio” fue incluido en una antología junto a otros poetas extranjeros en el número 170 de la revista Némesis . Su poema “Días” fue incluido en una antología junto a otros poetas Limeños en la Editorial Ángeles de Papel. Su poema “No estoy muerto”  fue incluido en el libro La palabra de fiesta, publicado por la Sociedad Literaria Amantes de País, de José Beltrán Peña.

Ha participado en recitales como el de la presentación del número 170 de la revista Némesis (Limbo, de Barranco) - Noches literarias de Villa el Salvador (Centro de Documentación de Villa el Salvador) - Sábados Culturales (Movimiento Mundial de Intelectuales y Artistas) - Sociedad Literaria Amantes del País (Casa Museo Ricardo Palma-Miraflores) - Semblanza al poeta y periodista Antonio Cisneros del Colectivo Cultural Kaverna Aetatis (Biblioteca Municipal) - Presentación de poemarios de poetas del Colectivo Kaverna Aetatis (Biblioteca Municipal).

 

 

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