Señaló el Dr. Armando Gallegos, director de GERENS Escuela de Postgrado.

El Perú necesita establecer una única visión en torno a su minería, así como políticas intersectoriales y transversales en todos los niveles de gobierno que garanticen el desarrollo, competitividad y sostenibilidad de esta actividad productiva tan importante para el país.

Ello se concluyó este 30 de noviembre, en el tradicional Jueves Minero, organizado por el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP), donde se desarrolló la conferencia “Planeamiento Estratégico a largo plazo de la Industria Minera”, a cargo del Dr. Armando Gallegos, director de GERENS Escuela de Postgrado.

Según el especialista las recomendaciones expuestas en esta jornada están basadas en el estudio“Minería: Retos y Posibilidades – Planificación estratégica del sector minero en el Perú y benchmark con seis países mineros”, elaborado conjuntamente por el IIMP y GERENS Escuela de Postgrado.

Precisó que para este estudio comparativo se realizó una revisión total de los planes de desarrollo de países líderes en minería como Australia, Brasil, Canadá, Chile, México y Sudáfric, cuatro de ellos miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

“Según las conclusiones de este trabajo, en el Perú coexisten dos visiones de futuro para la minería de cara al año 2021 en los planes de desarrollo nacional Plan Bicentenario (CEPLAN 2011) y su actualización (CEPLAN 2015)”, indicó.

Gallegos explicó que mientras el primer plan resalta la importancia de la minería y aprovechamiento de los recursos naturales para alcanzar una economía diversificada, el segundo presenta una visión ambigua y no precisa metas y objetivos para el sector, lo que constituye una desventaja competitiva para el país.

El estudio también resalta que el éxito del sector minero depende de factores que en muchos casos están fuera del ámbito de competencias del ente rector de la minería y son competencia de otros ministerios o de distintos niveles de gobierno.

No obstante, se señala que “en el Perú los mecanismos de articulación entre el sector minero y los otros sectores relacionados son débiles”. A ello se suma la poca importancia que algunos gobiernos regionales le dan a la minería en sus respectivos planes de desarrollo, incluso aquellos con importante potencial geológico.

“Sería recomendable la formulación de una agenda de prioridades de articulación intersectorial de planes y políticas y trabajar proactivamente para materializarlas. La agenda de articulación deberá incluir temas cruciales para el funcionamiento y desarrollo del sector minero, como infraestructura de transporte, energía, gestión integrada de recursos hídricos, utilización del canon y regalías, etc.”, precisa el documento.

A ello se suman otras recomendaciones como el respaldo político del presidente de la República y de funcionarios clave en la consolidación de un plan estratégico del sector, reforzar los recursos y capacidades de articulación del Ministerio de Energía y Minas, etc.