Chile pretende gas peruano con pretexto de la “integración”
Mientras las violentas protestas azotan a Chile por el alza de los precios del gas, el gobierno chileno se siente confiado en una traición del gobierno de Alan García, que le vendería el gas de Camisea, que se exporta al precio de regalo de S/.0.70 el balón que a los hogares peruanos cuesta S/.35.00, gracias a los faenones de los contratos negociados en los gobiernos de Alejandro Toledo y continuados por Alan García.
Mientras las violentas protestas azotan a Chile por el alza de los precios del gas, el gobierno chileno se siente confiado en una traición del gobierno de Alan García, que le vendería el gas de Camisea, que se exporta al precio de regalo de S/.0.70 el balón que a los hogares peruanos cuesta S/.35.00, gracias a los faenones de los contratos negociados en los gobiernos de Alejandro Toledo y continuados por Alan García.
Como toda traición, ésta debe tener para el público algún adorno en su forma y para eso los chilenos diseñaron el trillado pretexto de la “integración”, en este caso la “integración energética”. ¿De qué integración se puede hablar cuando Chile no tiene hidrocarburos y el Perú sí los tiene? Eso sólo significa parasitación de los recursos del Perú a favor de Chile, no es ninguna integración, término usado para engañar a las masas.
Ante la visita de García a Chile, el canciller chileno Alfredo Moreno dijo que ambos países pueden avanzar, entre otros temas, en la integración energética y eléctrica y agregó que Chile estudia la posibilidad de concretar la integración energética con Perú.
Para burla, Moreno dijo que se trata de “beneficio mutuo, tenemos que avanzar y naturalmente en ese campo hay un beneficio mutuo”, según declaró al diario El Mercurio.
Moreno explicó que Chile tiene mucho interés en ampliar el abastecimiento de energía eléctrica que requiere con cada vez más urgencia sus industrias.
“Creemos que en todas las cosas que sean de beneficio mutuo tenemos que avanzar y naturalmente en ese campo hay un beneficio mutuo”, dijo.
Como Chile no tiene gas ni petróleo, debe importar desde Argentina o procesa en dos plantas de licuefacción de gas natural licuado comprado en otros países. Sólo existe extracción en el sur, que únicamenteo cubre las necesidades de consumo de esa región.
García, en entrevista al diario El Mercurio había dejado entrever una posible venta de que el Perú venda gas natural a Chile. Aunque, según diversas versiones, el gas que se exporta estaría ya llegando a Chile con rutas disfrazadas.
Energía eléctrica, gas, PPK y Toledo
Hay que tener presente que la explotación del gas peruano es una gran estafa. En primer lugar, los peruanos pagamos en nuestras facturas de consumo eléctrico por el tendido de tuberías transportadoras, para que de ello se beneficie una compañía con tan sólo mil soles de capital, que fue impuesta sospechosamente por intervención de Pedro Pablo Kuczynski.
Pese a que costó a todos los peruanos, la distribución de nuestro gas no es libre, se niega la venta a más de 22 empresas peruanas que lo requieren. No es libre la venta porque para que no consuman, se obliga a las empresas a ¡postular! para su compra pagando bases y trámites que cuestan miles de dólares. ¿Gastaría usted miles de dólares para comprar bases sin la seguridad de que finalmente le vendan?
Finalmente, quemar nuestro gas para vender energía eléctrica a Chile es otra carta que barajan los chilenos.
La exportación, ya sea de gas natural o la quema de nuestro gas para vender energía eléctrica a Chile beneficiaría principalmente a Codelco, empresa estatal chilena cuyas ganancias sirven para el desenfrenado armamentismo de Chile contra el Perú.
Esperemos que los pocos políticos decentes que quedan eviten la traidora y peligrosa exportación de gas.
Ante la visita de García a Chile, el canciller chileno Alfredo Moreno dijo que ambos países pueden avanzar, entre otros temas, en la integración energética y eléctrica y agregó que Chile estudia la posibilidad de concretar la integración energética con Perú.
Para burla, Moreno dijo que se trata de “beneficio mutuo, tenemos que avanzar y naturalmente en ese campo hay un beneficio mutuo”, según declaró al diario El Mercurio.
Moreno explicó que Chile tiene mucho interés en ampliar el abastecimiento de energía eléctrica que requiere con cada vez más urgencia sus industrias.
“Creemos que en todas las cosas que sean de beneficio mutuo tenemos que avanzar y naturalmente en ese campo hay un beneficio mutuo”, dijo.
Como Chile no tiene gas ni petróleo, debe importar desde Argentina o procesa en dos plantas de licuefacción de gas natural licuado comprado en otros países. Sólo existe extracción en el sur, que únicamenteo cubre las necesidades de consumo de esa región.
García, en entrevista al diario El Mercurio había dejado entrever una posible venta de que el Perú venda gas natural a Chile. Aunque, según diversas versiones, el gas que se exporta estaría ya llegando a Chile con rutas disfrazadas.
Energía eléctrica, gas, PPK y Toledo
Hay que tener presente que la explotación del gas peruano es una gran estafa. En primer lugar, los peruanos pagamos en nuestras facturas de consumo eléctrico por el tendido de tuberías transportadoras, para que de ello se beneficie una compañía con tan sólo mil soles de capital, que fue impuesta sospechosamente por intervención de Pedro Pablo Kuczynski.
Pese a que costó a todos los peruanos, la distribución de nuestro gas no es libre, se niega la venta a más de 22 empresas peruanas que lo requieren. No es libre la venta porque para que no consuman, se obliga a las empresas a ¡postular! para su compra pagando bases y trámites que cuestan miles de dólares. ¿Gastaría usted miles de dólares para comprar bases sin la seguridad de que finalmente le vendan?
Finalmente, quemar nuestro gas para vender energía eléctrica a Chile es otra carta que barajan los chilenos.
La exportación, ya sea de gas natural o la quema de nuestro gas para vender energía eléctrica a Chile beneficiaría principalmente a Codelco, empresa estatal chilena cuyas ganancias sirven para el desenfrenado armamentismo de Chile contra el Perú.
Esperemos que los pocos políticos decentes que quedan eviten la traidora y peligrosa exportación de gas.
