Julio Guzman 6Presenta acta, considerada falsa, que ya fue rechazada por el Jurado Nacional de Elecciones

Intentar salvar la candidatura presidencial de Julio Guzmán habría llevado a incurrirse en serios delitos penales. El penalista César Nakasaki advirtió que a la luz del fallo emitido por el JNE, se estaría reiterando en una maniobra fraudulenta al presentar copia del acta de una Asamblea General de Todos Por el Perú (TPP) que nunca se realizó. Los delitos serian “inducción error a funcionario público” y “falsedad material”.

“Diferente solamente la forma, porque viene fedateado y certificado”, sostuvo Áureo Zegarra, presidente de Todos por el Perú, sobre la documentación que le presentó ayer el Jurado Electoral Especial (JEE) de Lima Centro, y que es la misma que ya le presentó al JNE.

Zegarra sostuvo que después de la presentación de este documento “lo único que le queda al Jurado es dar pase a la fórmula presidencial y a la lista de candidatos al Congreso”.

Sin embargo desde la perspectiva de Nakasaki lo que también podría producirse en las próximas horas es que se denuncie penalmente a los que presentaron el supuesto documento que formaliza la elección presidencial de Guzmán.

“Si se comete un delito para defenderse, ya no se analiza su defensa (…) Si yo realizo un fraude dentro de un proceso eso se llama inducción error a funcionario público y también falsedad material”, precisó sobre los tipos penales en los que se habría incurrido.

El letrado precisa que el “fraude procesal” es lo que se desprende en la resolución N°093-2016/JNE sobre la copia de la Asamblea General Extraordinaria que organizó Todos Por el Perú, y que luego le dio paso a la elección de Julio Guzmán.

“Para la posición en mayoría, la Asamblea General que convalida todos los defectos no se realizó. No solo es que no lo crea, se está hablando de un documento falso, está hablando de un fraude procesal. Ya la discusión no es fin y forma, sino ¿Se cometió o no delito dentro de un proceso administrativo?”, observó.

El letrado precisa que incluso en el fallo del JNE, se hace la observación que si la agrupación de Guzmán tenía la “prueba de oro” en sus manos para salvar su inscripción, en ninguna de las tres oportunidades que se le dio para presentarla, no lo hizo.

“Ha dicho, señor usted tenía un documento de gran trascendencia: un acta de una asamblea donde se convalidaba todo. Un usted envió un escrito con fecha tal y no se mencionó. Envió otro escrito con fecha tal y tampoco lo mencionó. Vino usted a una audiencia y no habló para nada, y ahora viene en apelación ¿Y de pronto aparece la prueba de oro?”


La Razón, 22.02.2016