¿Seguirá blindando el aprofujimorismoa Donayre?
El congresista fujimorista Edwin Donayre fue condenado a a cinco años de prisión efectiva por la apropiación ilícita de combustible en el interior del Ejército, en virtud a la sentencia de la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema de Justicia.
Los latrocinios fueron perpetrados por Donayre en 2006 y fue investigado en el llamado caso “gasolinazo”. Entonces el hoy condenado era jefe de la Región Militar SUR (RMS), donde se detectó el robo de más de 44 mil galones de gasolina, equivalentes a más de S/ 2,500,000.00
Donayre su sucesor suscribieron oficios para sustentar un incremento de dotación de combustible que no fue entregado a las subunidades de dicha Región Militar, como señala la acusación fiscal.
Además de Donayre hay 41 involucrados más, civiles y militares, entre ellos el exjefe del Comando de Logística del Ejército (Cologe), general (r) Roberto Vértiz Cabrejos; el excomandante de la Primera Brigada de Fuerzas Especiales, general (r) Luis Torrejón Rivas.
Así informó hoy el Poder Judicial en su cuenta Twitter:
#Último. Sala Penal Permanente de la Corte Suprema resuelve recurso de nulidad presentado por el congresista y exComandante General del Ejército, Edwin Donayre Gotz, y otros exaltos oficiales, sentenciados por el delito de peculado en agravio del Estado. https://t.co/f8BstL245N pic.twitter.com/MiYa8QHLgQ
— Poder Judicial Perú (@Poder_Judicial_) 29 de abril de 2019
Esta sentencia es consentida y señala Donayre, firmó nueve oficios para justificar “un trámite inexistente de solicitud de combustible extraordinario destinado a la Región Militar Sur”. El combustible fue desviado a grifos particulares.
El incinerador
Para agravar su situación, se imputa a Donayre la creación de actas de entrega y recepción para ocultar la apropiación del combustible. Como si eso fuese poco, creó la Comisión de Incineración”.
En agosto de 2018, la Segunda Sala Penal Liquidadora de la Corte Superior de Justicia de Lima dictó sentencia para el parlamentario de Alianza Para el Progreso, sin embargo, el fujimorismo y el aprismo en el Congreso lo blindaron aduciendo que era necesaria una “sentencia firme”.