Increíble. Un cheque demuestra cómo la gerencia de Petroperú regaló a Seamarch US$426,659.20 burlando un Laudo Arbitral para reemplazarlo por un acuerdo extrajudicial. Una vez más se observa cómo las mafias se organizan y hacen metástasis, tomando al Estado como botín.
Cheque en provecho de Seamarch, la empresa del amigo del gerente de Petroperú
Seamarch, cuyo accionista es amigo del gerente de Petroperú, perjudicó a Petroperú con un fallido servicio de transporte de gas, contrato además obtenido por Seamarch con cuestionables movidas. El Laudo Arbitral estableció que tras deducir las pérdidas para Petroperú, correspondía pagar unos US$8,000 dólares a Seamarch, pero al final esta empresa sale cobrando un jugoso cheque se acerca al medio millón de dólares.
Nos preguntamos:
¿Para qué sirven los laudos arbitrales si no es para cumplirlos?
¿Por qué se desestiman los informes del Departamento Legal de Petroperú, dirigido la gerencia de esta empresa estatal?
¿Por qué, tras años de ser firme la posición del Departamento Legal de Petroperú, de un momento a otro se remueve al abogado clave y se opta por una empresa consultora que termina favoreciendo a Seamarch y se da trámite al pago a esta empresa en perjuicio de Petroperú?
La actuación clave es del gerente de Petroperú, Carlos Barrientos, amigo de Eric Stucchi, accionista de la empresa beneficiada, como muestran los pasos de los trámites conducentes a la autorización del desembolso a Seamarch.
El 18 de junio de 2020 Stucchi envía una carta con sus exigencias al gerente Barrientos y la tramitología corre expedita a atender lo requerido por Seamarch, como se aprecia en este documento (click aquí).
Los detalles son sórdidos y se espera que la Contraloría determine responsabilidades en este escándalo.
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