Viendo que el partido Perú Libre crece cada día, la prensa mermelera recurre a los golpes bajos para desacreditar a los candidatos de esta agrupación política con difamaciones sobre terrorismo, en un caso donde el acusado resultó absuelto
 
 

Guillermo Bermejo

 

 
A continuación el caso del candidato al Congreso Guillermo Bermejo, publicado hoy en Diario Uno:
 
¡Guillermo Bermejo, responde!
 
RICARDO MILLA TORO
Editor digital de Diario Uno
 
 
Si un candidato al congreso es atacado por la prensa monopólica, entonces tiene que ser nuestro entrevistado de hoy. Curiosamente esos mismos medios que lo atacan no lo entrevistan ni le dan derecho de réplica. Hoy Diario UNO le da tribuna al más “radical” de todos los candidatos al congreso: Guillermo Bermejo, candidato de Perú Libre por Lima con el número 5.
 
RM: ¿Cuánto tiene que ver el “terruqueo” contra Perú Libre y en especial contra usted en esta recta final de la campaña electoral?
 
GB: Es el pánico en el que han entrado los poderosos del país, que le ordenan a su prensa atacar sin cesar a Perú Libre y sus candidatos porque saben que el ninguneo a Pedro Castillo no funcionó y que ya no pueden tapar que vamos a pasar a la segunda vuelta y en primer lugar de las preferencias.
 
RM: Sin embargo, a usted se le procesó por terrorismo y salió absuelto…
 
GB: Luego de que evitáramos que les robaran 500 hectáreas a cien familias, incluidas comunidades ashaninkas, para construir una base militar norteamericana, se armó un expediente en base a mentiras. Se dijo que había un video que demostraba una reunión con mandos de Sendero Luminoso y un acta de sujeción firmada por mí. Jamás la presentaron. Como en la época nefasta de la dictadura, nos trajeron testigos sin rostro, que son pagados por el Estado para estas patrañas, y sus mentiras fueron tan groseras que generaban fastidio hasta de los jueces. La absolución fue algo que sabíamos desde el principio a pesar de los abusos que padecí.
 
RM: Usted denunció tortura y hostilidad policial y que por eso se refugió en Venezuela con apoyo de Naciones Unidas, ¿podría confirmarlo?
 
GB: Así es. Violando todo derecho me tuvieron 17 días en los calabozos de la Dircote, prendían luces potentes para no dejarme dormir y metían ratas a mi celda buscando quebrarme y no lo lograron. Luego de mi libertad, me hostilizaban poniendo en peligro mi vida. Así que asumí el exilio en Venezuela por ser parte de la comisión de derechos humanos de la ONU y mantuve reuniones periódicas con Naciones Unidas para los refugiados. Ambos me recomendaron no regresar al Perú y, sin embargo, volví apenas me enteré que mi juicio tenía fecha. Coordiné con el consulado peruano mi retorno y con la policía nacional. Aun así, me enviaron a un penal de máxima seguridad. Cuatro meses y medio después salí en libertad, absuelto y con la frente en alto.
 
RM: Sin embargo, a pesar de estos atropellos se le volverá a juzgar.
 
GB: Así es, y aquí estamos listos para demostrar una vez más nuestra inocencia.
 
RM: ¿Algo más que quiera decirles a nuestros lectores?
 
GB: Nos hemos comprometido a refundar la patria con una Asamblea Constituyente y una nueva Constitución. Soñamos un país con familias unidas donde a nadie le falte los servicios básicos, donde los jóvenes puedan estudiar, donde se industrialice la materia prima y donde sea el campo peruano lo que llene las mesas de todos. Pero también que sea un país donde no se persiga por ideas ni por luchar por los derechos de nuestros pueblos. Ese es el compromiso de Perú Libre y el mío. Espero que Dios y el pueblo nos den la oportunidad de llegar y hacer los cambios por los que hemos esperado 200 años.