La misión de observación de la Organización de Estados Americanos (OEA) destacó que el proceso electoral en el Perú fue un “proceso electoral positivo”, donde no se han detectado “graves irregularidades”.
“La Misión no ha detectado graves irregularidades”, señala el informe preliminar del grupo encabezado por el excanciller paraguayo Rubén Ramírez, que respalda la labor de los órganos electorales peruanos.
Como se sabe, al ver su tercera derrota electoral, el fujimorismo recurrea a nuevas maniobras incluso difamatorias, al denunciar “indicios de fraude”, tras interponer una solicitud de anulación de unos 200.000 votos, pero que analizando bien no constituyen irregularidades.
“La Misión destaca la coincidencia de ambas candidaturas de no proclamarse ganadores hasta que se hayan resuelto todas las impugnaciones”, añade el reporte del grupo de la Organización de Estados Americanos (OEA).
El jefe de dicha misión, Rubén Ramírez, aseguró que no se han registrado graves irregularidades en los comicios, pese a las denuncias de fraude en mesa hechas por la candidata de Fuerza Popular, Keiko Fujimori.
En su cuenta Twitter, señaló que en todos los encuentros observó “un proceso electoral positivo en el que se registraron mejoras sustantivas entre la primera y segunda vuelta”.
El excanciller paraguayo enfatizó que “la misión no ha detectado graves irregularidades” en las elecciones realizadas en Perú.
Precisó que ha entregado un informe preliminar con las apreciaciones del grupo de observadores, así como las recomendaciones para fortalecer los procesos electorales.
“La misión confía en que las autoridades electorales continuarán llevando a cabo un trabajo serio y profesional que han realizado hasta ahora”, manifestó.
Instó a que se resuelvan con apego a derecho los recursos presentados, y que una vez concluida esa etapa “se reconozca y respete la voluntad popular”.
