Centrales asháninkas del Río Ene (CARE) y Río Tambo (CART) acusan al ministro del Interior de pretender promover el cultivo ilícito de hoja de coca en perjuicio de comunidades nativas.
 
Servindi, 14 de octubre, 2021.- “Por su pretensión de promover el narcotráfico y el cultivo ilícito de hoja de coca en el VRAEM”, asháninkas de la selva central exigieron la renuncia del ministro del Interior, Luis Barranzuela.
 
 

Luis Barranzuela

 

 
Cuestionan sus recientes declaraciones a favor de cocaleros y otras que motivaron la salida del presidente ejecutivo de Devida para poner en su lugar a un cocalero que vaya “en la línea de su interés”.
 
“En un contexto de narcotráfico, la hoja de coca no es sagrada ni tradicional”, señalaron la Central Asháninka del Río Ene (CARE) y la Central Asháninka del Río Tambo (CART).
 
Para las organizaciones indígenas, está claro que Barranzuela pretende impulsar una agenda pro cocalera, hecho que rechazan rotundamente por los graves daños que causa esta actividad en sus territorios.
 
En los últimos seis años, “el territorio de las comunidades nativas del VRAEM se ha visto terriblemente afectado y vulnerado por la invasión de colonos cocaleros”, expresaron en un pronunciamiento.
 
Dichos cocaleros “han ingresado rompiendo la estructura social y económica de las comunidades, y deforestan masivamente nuestro bosque para el cultivo de hoja de coca”, añadieron.
 
Por ello, rechazaron la permanencia de Barranzuela en el Ministerio del Interior, así como la pretensión del Gobierno de colocar a un cocalero o pro cocalero como nuevo presidente ejecutivo de Devida.
 
“Hemos tomado conocimiento desde hace semanas atrás de la pretensión del Gobierno Central de designar como presidente ejecutivo de Devida a una persona vinculada con cocaleros”, señalaron.
 
Ante esta situación, instaron al presidente Pedro Castillo y la premier Mirtha Vásquez a nombrar como presidente de Devida a una persona que “no tenga vínculos directos o indirectos con cocaleros”.
 
“CARE y CART se han opuesto sendas veces a la invasión de cocaleros y al narcotráfico, y por el contrario apuestan por otro tipo de desarrollo que genera sostenibilidad social, económica y ambiental”, expresaron.