castanedalossio Congresista Luciana León afirma que debió entablar diálogo con comerciantes y no pasar problema “de taquito” al Ministerio del Interior

 “El alcalde Luis Castañeda Lossio debe asumir su responsabilidad en el caso del Mercado de Santa Anita, porque pudo evitar el atrincheramiento de los comerciantes entablando el diálogo hace mucho tiempo para hallar una solución pacífica”, afirmó la congresista Luciana León Romero, quien criticó que la seguridad de los niños y las mujeres esté por medio ante un posible desalojo por falta de previsión municipal.
Dijo que el burgomaestre limeño debió de entablar una estrategia que considerara varias opciones de solución a los comerciantes, para que pudieran continuar ―sin problema alguno― con sus labores de venta de productos de primera necesidad en algún otro punto de la capital.
 “No es posible que ante la preocupación pública sobre un desalojo que puede ser violento por la resistencia de los atrincherados, el alcalde limeño no haga ningún pronunciamiento, sino más bien, deje toda la responsabilidad al Ministerio del Interior sobre las consecuencias materiales o humanas que pueda presentarse”, agregó la parlamentaria aprista.
 Expresó que el bajo perfil de Castañeda demuestra su falta de calidad humana, porque desde un inicio debió de conversar con la dirigencia de los comerciantes, empadronarlos buscándoles una opción de trabajo. “No, de taquito le ha pasado la responsabilidad al Ministro Alva Castro, quien podría enfrentar ―luego del desalojo― una avalancha de denuncias por las organizaciones de derechos humanos.
 “Estamos de acuerdo con el principio de autoridad y la decisión del Poder Judicial, así como, el respeto al estado de derecho, pero también es obligación de la autoridad municipal evitar el conflicto y entablar el diálogo como política prioritaria, más aún cuando de por medio están mujeres, niños y padres de familia que sólo quieren trabajar”, manifestó finalmente Luciana León.
 Si algo ha caracterizado a Castañeda Lossio desde sus épocas de Emape y la Seguridad Social es el desprecio al diálogo.