Por Edith Gómez*
Tener buenas relaciones laborales es un aspecto importante, ya que en algunas ocasiones solemos compartir más tiempo en el entorno laboral que en el propio hogar. Por ello, es fundamental consolidar relaciones armónicas con nuestros compañeros.
En efecto, son muchos los comentarios sobre lo beneficioso que resulta fomentar buenas relaciones en el trabajo debido a que esto puede incluso aumentar la productividad de los empleados, además que permite trabajar con un buen estado de ánimo.
Por otro lado, tener buenas relaciones en el trabajo, también resulta positivo para quienes desean ampliar una red de contactos efectiva.
A continuación, compartiremos contigo algunos consejos que te enseñarán la manera adecuada para trabajar en un ambiente basado en el respeto y el compañerismo.
Consejos para mejorar las relaciones laborales
- Tener buena actitud: ya que esto dice mucho del empleado. En lugar de asumir una actitud a la defensiva o presumida, lo mejor es dedicarse a realizar un buen trabajo. Esto lo observarán los demás compañeros y aprenderán a respetar los resultados del proyecto que realizas.
- Ofrece la mejor versión de ti: en lugar de tratar ser alguien que no eres, simplemente para encajar, pues, esto lo perciben los demás compañeros y sólo lograrás que te rechacen.
- Aprende lo más que pueda: sin intentar ser ese empleado que cree sabérselas todas. Se debe tener una actitud abierta al aprendizaje y al trabajo en equipo. Las mejores relaciones se construyen cuando no vemos competencia en los compañeros, sino oportunidades para aprender nuevas cosas y ampliar nuestra experiencia.
- Exprésate de forma correcta: evitando un vocabulario impropio para un profesional. La forma en la cual se expresa una persona es notada por los demás que se encuentran en el entorno, y también podría convertirse en un motivo para que los demás compañeros decidan alejarse. La forma de hablar también es una carta de presentación en sí misma.
- Equilibra tu vida: aprendiendo a diferenciar lo que ocurre en tu vida familiar y laboral. Esta distinción te permitirá tener un equilibrio que se reflejará en el trabajo. Al momento de llegar a la oficina, todos los asuntos del hogar deben quedarse en el hogar, así como cuando se llega al hogar y los empleados buscan desconectarse del trabajo.
- Toma la oportunidad de socializar con tus compañeros: esto es beneficioso para mejorar las relaciones en el entorno laboral porque permite conocerlos más y encontrar puntos en común que faciliten desarrollar buenas relaciones. Pregunta sus nombres y trata de memorizarlos, saluda de manera frecuente y mantén la cordialidad para que te tomen como una persona educada, y con una personalidad agradable con la cual se puede compartir momentos amenos.
- Aprende a escuchar: y no te enfoques solamente en hablar y hablar sin tomar un minuto para escuchar a tus compañeros. Detenerse un momento y tomar un minuto para prestar atención a lo que los demás dicen hará posible que los demás sientan que sus opiniones son valoradas.
- Sonríe: no siempre debes tener un rostro que refleje seriedad. Estar sereno y sonreír transmite armonía en el entorno y hará sentir bien a los demás compañeros. Si no eres amigable, los otros empleados podrían tomarte como una persona negativa y querrán alejarse.
- Evade los comentarios negativos: o caer en los comentarios de pasillo sobre otros compañeros. No existe nada peor que esto para abrir una brecha de enemistad entre los empleados. Este tipo de comportamiento no es profesional, impide crecer dentro del entorno laboral y crea una barrera al momento de querer tener buenas relaciones en el trabajo.
- Aprecia las buenas intenciones: de los otros compañeros y aprende a decir “gracias”. Esto les incentivará a seguir prestando su colaboración y formar equipos contigo. Es necesario hacer valoraciones positivas sobre los compañeros que realizan un buen trabajo mpara obtener a cambio buenos comentarios, así como recibir buenas sugerencias al momento de llevar a cabo proyectos.
- Ten buena disposición: cuando te toque colaborar. Incluso, puedes ayudar cuando ni siquiera se te haya pedido hacerlo. Decir que te ofreces para prestar tu apoyo, hará sentir bien a los demás compañeros y tal vez puedan considerarte y tomar tus consejos de buena manera. Este gesto inesperado suele causar buenos efectos.
- Date la oportunidad de crecer: por medio de las buenas críticas que los demás hagan sobre tu trabajo. No tomes todos los comentarios a mal, ni de forma personal. Quizás muchos compañeros lo hacen para que hagas mejor el trabajo. Saber diferenciar el tipo de críticas te ayudará a ampliar los conocimientos en tu área y cuando necesites despejar alguna duda, los demás estarán dispuestos para ayudarte.
- Adopta las políticas de la empresa: pues, eres tú quien ingresa a la empresa y eres tú quien debe adaptarse. No es la empresa la que debe adaptarse a tu personalidad, sino al contrario.
Aplicar estos consejos produce efectos positivos para mejorar las relaciones en el trabajo. También es importante compartir momentos con los demás miembros del entorno laboral, lo cual no implica tener que comentar sobre tus finanzas personales, ni otros problemas del hogar, sino simplemente de tener un momento agradable.
* Editora - gananci.com