Por Rocío Ferrel
El ministerio de Transportes y diversas organizaciones promueven el uso de bicicletas como una medida más para evitar aglomeraciones en el transporte público en medio de la pandemia del coronavirus COVID-19, pero una bicicleta normal presenta algunos inconvenientes y tal vez habría que pensar en bicicletas plegables.
Con las bicicletas estándar tenemos que, en Lima, la ciudad más congestionada, muchas empresas no tienen lugar para estacionamiento y cuando tienen estacionamiento, muchas veces es para jefes y es ocupado exclusivamente por autos.
En general, aún empresas que tuviesen la voluntad de ayudar a tener bicicleta a su trabajador, definitivamente carecen de espacio.
Por falta de espacio, algunos ciclistas dejan sus bicicletas con candado o cadenas en la calle, pero aún así son robadas, lo cual es otro desaliento para su uso.
Así las cosas, los intentos del gobierno de promover el uso de la bicicleta no serán más que un buen deseo, pues las limitaciones son muchas. Otras ciudades, como las europeas son mucho más amigables con el ciclismo, pero la realidad, en especial en Lima, es dura, pues siempre se privilegió al automóvil.
Totalmente portable
Bicletas y patines plegables
Los vehículos que se deberían promover son los mecánicos, no aquellos que requieren de baterías, pues aunque el uso no contamina el ambiente, la extracción de litio causa estragos en la naturaleza.
Las bicicletas plegables parecen la mejor alternativa. Un modelo como en el ejemplo requiere tan sólo una bolsa de 65 cm de alto, 75 cm de largo y 33 de ancho, con lo cual pueden caber en casilleros con llave.
También un trabajador podría llevar su bolsa con la bicicleta plegada y colocarla debajo de su escritorio, como también lo podrían hacer los estudiantes. Un vendedor podría tener su bicicleta plegable bajo el mostrador.
Las patinetas también existen en modelos plegables, pero su uso no está difundido.
Ambas opciones permiten una desinfección rápida del vehículo antes de entrar a un lugar.
¿Qué hacer?
Se debería otorgar estímulos a las empresas o instituciones educativas que doten de bicicletas o patinetas a sus trabajadores y facilidades para que las mantengan dentro de la empresa o centro educativo, cuando se autorice el regreso a las aulas.
Brindar subvenciones a talleres o fábricas para que produzcan estos vehículos, con la condición de que los coloquen en el mercado a un costo razonable y que sigan buenos estándares de calidad.
Seguridad total
Además de la seguridad que implica entregar al ciudadano de carriles protegidos de vehículos mayores, se debe dotar a estos carriles de seguridad policial y de serenazgo, pues el hampa estará al acecho de lugares con menos vigilancia para arrebatar estos vehículos, en especial, sabiendo que pulula el hampa venezolana, dedicada a estos asaltos.
