Grave situación en la seguridad nacional

Por: Vicealmirante MGP Javier Pinillos Cabada

En los cincuenta y siete segundos que dedicó a las Fuerzas Armadas el Presidente García en su mensaje a la Nación el 28 de Julio, reconoció el apoyo de las FF. AA. en nuestra vida democrática y resaltó el deber de reconocerlas, respetarlas y defenderlas. Expresó también que el Perú cuenta con un Sistema de Defensa de "alta capacidad disuasiva" que garantiza su soberanía y desarrollo. No dijo una palabra acerca del Plan de adquisiciones para alcanzar esas metas, ni tampoco mencionó la grave situación del personal militar a causa de lós míseros sueldos que percibe desde hace 18 años.


Es deber de un Mandatario el decir la verdad de la situación a su pueblo y no ocultar las verdades tales como aquello de la "alta capacidad disuasiva", cuando por el descuido de los últimos gobiernos y del actual el Poder combatiente relativo es totalmente favorable a Chile. Del mismo modo en lo relativo a "reconocer, respetar y defender a las FF. AA".

, pues no se tiene la menor consideración por ellas, manteniéndolas en un estado caótico de remuneraciones que además de injustas atentan contra el desempeño eficiente en sus riesgosos cargos al tener que dejar a sus familias a su suerte y verse obligados a buscar algún ingreso adicional trabajando en sus pocas horas libres en cualquier oficio.

No, Señor Jefe Supremo de las FF. AA esta falta de sinceridad y preocupación por quienes son los defensores de la Nación que adicionalmente cooperan en el desarrollo del país ha creado un gran malestar. Un somero análisis de la situación nos lleva a recordar las intenciones y planes de los EE. UU. de NA sobre los países latinoamericanos que se inician en el Ecuador en Noviembre del 2004 con el planteamiento del Secretario de Defensa de los EE. UU .de NA. Donald Rumsfeld quien acompañado de su sub Secretario para asuntos del hemisferio occidental Rogelio Pardo y el nuevo Jefe del Comando Sur General Bartz Craddock en la reunión Cumbre de Ministros de Defensa latinoamericanos de pretender desactivar los ejércitos en América Latina para convertirlos en Fuerzas policiales, anexas a la Policía regular para combatir el narcotráfico y el terrorismo en beneficio de su país. Tales pretensiones debieron ser rechazadas enérgicamente. No debe olvidarse que desde el 28 de Julio de 1821 el General Don José de San Martín proclamó que el Perú por la voluntad general de sus pueblos y la justicia de su causa que Dios defiende dejó de ser colonia de España y se constituyó en una República democrática, social, independiente y soberana (Art. 43 de la Constitución ). Asimismo que nuestro Himno Patrio dice: "Somos libres, seámoslo siempre y antes niegue sus luces el sol que faltemos al voto solemne"… no podemos pues aceptar ningún tipo de colonialismo en pleno siglo XXI siendo un país soberano.

Mas adelanto el gran país del norte tiene la pretensión de desaparecer como países a Ecuador, Perú y Bolivia y subordinarlos a Chile, país al que miran con gran simpatía y apoyan en su exagerada carrera armamentista vendiéndole los poderosos aviones de combate F.16 que a ningún otro país ha cedido y en la actualidad tiene pretensiones sobre la Amazonía.

Volviendo al Plan de la desactivación de las FF. AA .es de notar que para lograr este objetivo basta con reducir los presupuestos y no mejorar las remuneraciones. Será esto ¿casualidad o complicidad? para desalentar al personal y que pida su pase al retiro. El Ministro de Defensa dice con gran inocencia que le preocupa que muchos Oficiales estén solicitando el pase al Retiro para mejorar sus ingresos en la empresa privada, cuando sabe muy bien que la única razón para abandonar la Carrera es la mísera remuneración que perciben por sus arriesgados servicios y el desinterés y engaños por parte del Gobierno para mejorar su situación. Es por todo ello que el personal en situación de retiro, además de las viudas y los discapacitados por causa del terrorismo han decidido salir a las calles para reclamar sus derechos, situación sin precedentes en el país y que hace ver la decisión de no aceptar mas engaños y burlas y reclamar como lo hacen los miembros del sector público.

No se puede aceptar las inocentes explicaciones del Ministro de Defensa ni las decisiones del ex Ministro de Economía ni por cierto la indiferencia manifestada por el Jefe Supremo de las FF. AA. en su discurso del 28 de Julio. La situación es grave al extremo de no haberse dado respuesta al pronunciamiento de los Generales y Almirantes ex Ministros, Comandantes Generales y Jefes del Comando Conjunto. La Fuerza Armada y la Policía Nacional están fuertemente cohesionadas y dispuestas a tomar las medidas necesarias para la solución de sus problemas particularmente el de sus remuneraciones para las que existe un Decreto Legislativo del actual Presidente de la República en su Gobierno anterior incumplido hasta la fecha y un proyecto de Ley preparado en forma conjunta por las autoridades civiles y militares que duerme el sueño de los justos en el Congreso.