bebe recien nacidoCarlos Javier Jarquín

La niñez es el despertar de la existencia humana, para algunos es una fase encantadora, para otros puede ser lo más sombrío de su existir. Para quienes han tenido y tienen el honor que su llegada a este mundo sea de júbilo para sus padres, familiares y amistades deben sentirse cordialmente dichosos, porqué millones de personas hemos sido recibido con llanto, dolor, miedo y excedente grado de preocupación por ejemplo; una mujer joven menos de 20 años si por algún apasionado accidente salió inesperadamente embarazada y ésta financieramente no es autónoma, cuándo decide contarle a su novio que está encinta, ella recibirá estas 4 respuestas:

 

1. Probablemente se alegrará y él se hará responsable de ella y de su hijo.

2. Quizás se marche de su vida y le reclamará que porque no se cuidó.

3. Podría sugerirle que para el bien de ambos lo ideal es que debe abortar.

4. Le pondrá lluvias de pretextos diciéndole que ese hijo no es de él y que lo mejor es terminar la relación.

En últimos instantes la que decidirá si ese ángel llega al mundo terrenal será ella, y que vergonzoso que ésta mujer se decida por la más pésima decisión. En la actualidad podemos observar con signo de elevada ansiedad la enorme cantidad de niños que están creciendo sin el indispensable afecto paterno, ¿Porqué permitimos que estos niños inocentes sean los que paguen las torpes decisiones de los mayores? La responsabilidad no debe recaer sólo en el hombre, así como ambos decidieron darse placer con acto de complicidad también deberían cumplir sus obligaciones. Alguien dijo; “tu no elegiste a tus padres”, es verdad nosotros no elegimos a nuestros padres, como hombre si elijo a la madre de mis hijos y tú como mujer si puedes elegir al padre de tus hijos.

Contemporáneamente lo que sucede es que la mayoría de hombres y mujeres son alérgicos a la responsabilidad con sus propios hijos, si has sido protagonista de traer un hijo a este mundo tu obligación es estar presente constantemente sin importar la circunstancia del ahora, mujeres procuren que el padre de sus descendientes sea un hombre que manifieste honestidad en todo, no te dejes conducir por dinero, o palabrerías preciosas porque pudieras ser víctima de trampa lamentable. Si tienes un hijo y te has separado de su madre no lo dejes en el olvido, aprende a tener equilibrio de tus sentimientos y emociones que la diferencia de ustedes no afecte la vida de ese inocente pequeño. No abandonemos a los niños ellos merecen nuestro amor y todo lo primordial para que puedan crecer en un mundo donde sus derechos sean respetados, en una sociedad donde todos tengan oportunidades iguales.

Si no estás preparado para la llegada de un bebé no andes actuando con hipocresía, con la vida de un ser humano no se juega en especial con la de un niño, existen muchos casos dónde los niños son utilizado para generar ingresos económicos, ante la presencia de la naturaleza esas decisiones son incorrectas, a través de estás líneas hago un llamado a todos los padres y madres irresponsables; no desprecies a tus niños hoy ellos te necesitan pero mañana tú necesitarás de ellos, si hoy lo ignoras mañana no te lamentes cuando ellos ignoren tu presencia, la vida es de tres etapas; niñez, juventud y vejez, la primera y la última son las fases sumamente difíciles de la vida porqué dependemos de otros. Si hoy te crees inmortal y con toda la vibra del universo prepárate porque mañana todas tus fuerzas desaparecerán y sino has sabido ganarte el cariño de tus hijos, estás en riegos de vivir una vejez en la cárcel de la soledad y pleno abandono.

  • Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
  • Escritor y poeta. 30/04/20