Alan Fairlie Reinoso
 
La discusión sobre la importancia de las vacunas en este contexto es crucial. En una primera dimensión, esta se basó principalmente en la obtención de una vacuna. Pero, una segunda disyuntiva radica en su distribución. Una publicación reciente del Banco Mundial, titulada “Tecnologías digitales y distribución de vacunas: oportunidades y desafíos” [[1]] analiza esta situación y la relaciona con la necesidad del desarrollo de tecnologías digitales en el contexto de distribución de vacunas. Resumimos a continuación, algunos de sus hallazgos.
 
 
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Los desafíos en la distribución de las vacunas
Los desafíos que están presentes en la distribución de las vacunas se encuentran, por un lado,  relacionados a la producción y transporte de estas, sujetas a un exceso de demanda actual y que tiene como consecuencias retrasos en la producción, la disponibilidad de cadenas de suministro o confiabilidad, el riesgo de demoras, y la priorización de grupos vulnerables. Asimismo, respecto a la aplicación de las vacunas, la coordinación de un calendario de vacunas, la verificación de la calidad de las vacunas, el seguimiento de quienes las han recibido y los esfuerzos por garantizar que la mayoría de las personas se movilicen y se vacunen.
 
El rol de la tecnología
Dada la necesidad de actuar rápido, así como la escala de gestión masiva que el proceso de vacunación implica, las tecnologías digitales tienen un rol protagónico dentro de la planificación, distribución, seguimiento y gestión de los programas de vacunación. En primer lugar, el uso de plataformas de código abierto que han sido parte de los kits de herramientas de vigilancia, respuesta y administración de vacunas COVID-19 promovidos por la OMS, resultan un sistema integral de metadatos que ha permitido la mejora en la vigilancia del virus y plantea ser una alternativa para la entrega de vacunas. En el desarrollo de este mecanismo, también se plantea que herramientas digitales existentes puedan ser reutilizadas en este contexto. Sin embargo, resulta relevante la infraestructura digital que posea un país en cobertura y calidad de redes, para extender la digitalización logística en todo su territorio.
 
Otra forma en la cual la tecnología es útil en este contexto, es la elegibilidad de los pacientes a ser vacunados. La mayoría de los países dentro de sus planes de vacunación, ha determinado esquemas  en diferentes fases según el tipo de exposición y vulnerabilidad que se tiene al virus, así como el seguimiento de los vacunados entre dosis. De esta forma, se puede manejar una única fiable identificación de la población a través de un sistema integrado que registre todos estos procesos.  
 
En este caso, el reto que se presenta es salvaguardar la información personal de los vacunados. Por lo que, los países deberán garantizar la protección de datos, así como evitar su manipulación. Adicionalmente, los gobiernos deberán ser capaces de utilizar los datos a fin realizar gestiones entorno a la planificación, aunque esta también estará sujeta al marco regulatorio del uso de esta información, así como de las plataformas de gestión e intercambio de datos empleadas para compartir y comparar información de ser necesario realizar ello.
 
Los gobiernos deberán garantizar que el uso de las tecnologías digitales durante la vacunación pueda articularse a la infraestructura digital que estos posean, así como las competencias informáticas del personal a cargo, para no presentar dificultades durante el proceso.
 
En países marcadamente distintos a nivel geográfico como muchos de la región de América Latina y el Caribe, se enfrentarán retos para una adecuada digitalización. Adicionalmente, la gestión de datos deberá ser articulada a protocolos de ciberseguridad.
 
Se debería garantizar que la vacunación se realice de la forma más transparente posible y que esta pueda llegar en primera instancia a quienes más lo necesitan. La digitalización es un instrumento clave. Pero, un pre-requisito es que prime el interés común y no intereses subalternos.
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[1] Banco Mundial (2021). Tecnologías digitales y distribución de vacunas: oportunidades y desafíos.