Cerebros de niños ricos y pobres procesan la información de forma distinta
Córtex prefrontal

Los cerebros de los niños pobres procesan la información de manera diferente a los de los acomodados, según un estudio de la Universidad de California en Berkeley, publicado en el Journal of Cognitive Neuroscience.


Las diferencias se establecieron en la actividad eléctrica cerebral en una parte del cerebro relacionada con la solución de problemas, en niños de 9 y 10 años.

La revista describió el estudio como un llamado a despertar acerca del impacto de la pobreza, pues pese a que tanto niños pobres como ricos exhiben comportamientos sociales similares, sus cerebros procesan la información de manera distinta.

El estudio comprendió a 26 niños, 13 pobres y 13 de nivel económico alto, que fueron analizados con electroencefalogramas (EEG), que midió la actividad en el córtex prefrontal del cerebro.

Durante las pruebas, a los niños se les se mostró de improviso imágenes imprevisibles en una pantalla, lo cual evidenció que aquellos que provienen de familias pobres presentaron una menor respuesta del córtex prefrontal que los niños de hogares acomodados.

Los niños de estratos bajos no detectaban o procesaban el estímulo visual, no mostraban el impulso extra del córtex prefrontal. Siendo ambos grupos de menores, los pobres y los ricos, de salud normal, los investigadores creen que los ambientes estresantes propios de los estratos socieconómicos bajos pueden ser la causa de la diferencia.

El papel del lenguaje

Estudios previos sugerían que a los niños de familias de bajos ingresos se les habla poco, y que pueden llegar a escuchar unas 30 millones menos de palabras que los niños pudientes a los cuatro años de edad.

Para el profesor Thomas Boyce, otro de los investigadores, hablar más a los niños estimula el desarrollo del córtex prefrontal. Su colega, Robert Knight, precisó que con acciones adecuadas y entrenamiento se puede mejorar incluso a los niños mayores.