Más corrupción en ESSALUD

 

El Secretario general del Sindicato del Cuerpo Médico de PADOMI (Prestaciones de Atención Domiciliaria) en EsSalud, doctor César Portella Díaz, denunció ante LA PRIMERA que viene recibiendo constantes amenazas de muerte contra él y su familia por haber denunciado las serias irregularidades cometidas por el actual gerente de Oferta Flexible de esta entidad, Carlos Orellana Salazar.

 

Orellana fue designado, en el 2006, al cargo por el presidente ejecutivo de EsSalud a pesar de estar investigado por la Comisión Especial del Órgano de Control Institucional del Seguro Social de Salud (OCI) por cobrar doble sueldo del Estado, falsificar visitas domiciliarias cuando trabajaba como médico de Padomi, hechos a los que se suma la reciente contratación de su cuñado, en un claro acto de nepotismo.

La conformación de esta comisión investigadora del OCI se constituyó a raíz de que el Sindicato del Cuerpo Médico de EsSalud formulara una denuncia al respecto ante la Contraloría que exigió una respuesta a esta entidad de salud, luego de esperar en vano una decisión en torno al caso de Orellana por parte del presidente ejecutivo de EsSalud y del jefe del Órgano de Control Institucional del Seguro Social de Salud-EsSalud.

Portella, quien además es hostilizado, relató que el referido funcionario constantemente se jacta en público y ante sus subalternos de ser “intocable” por tener muy buenos contactos en el Partido Aprista y de ello se aprovecharía para hacer “lo que le da la gana, pasando sobre el director de Padomi, Dávila”.

Dijo que el propio Orellana se presenta como militante aprista con gran influencia en el poder, lo que explicaría las ínfulas con que trata a los profesionales de EsSalud a quienes sin la mayor justificación sanciona, mientras que el personal de su entorno, que ha ido colocando desde que asumió la gerencia, sale y entra a la hora que mejor le parece hasta llegar al grado de suspender las labores cuando es el cumpleaños de uno de ellos.

El dirigente, tras sostener que no duda que éste cuenta con protección, pues de otra manera no se entiende por qué fue designado a un puesto gerencial y más aún continúa en el mismo a pesar de la serie de denuncias contra él y que han valido la expulsión de EsSalud de otros médicos, que al igual que él, cobraron doble sueldo al Estado o fraguaron los informes de los estados de salud de los pacientes.

Por tal razón, expresó sus sospechas de que su presencia se deba a que sea la pieza clave para posibilitar posibles negociados en esta área.

Portella Díaz comentó que la última llamada anónima amenazante se realizó el día martes a la ocho de la noche y según contó en ella en medio de palabras soeces la voz le dijo que ya estaban enterados que LA PRIMERA publicaría una nueva nota en torno a la investigación en curso contra Orellana Salazar y denunciaría sobre la contratación de su cuñado.

Lo curioso del caso es que esta llamada se produjo horas después que este diario solicitó entrevistarse con el presidente ejecutivo de EsSalud, Fernando Barrios y con el propio Orellana Salazar para conocer las versiones de ambos sobre el rosario de quejas y denuncias recibidas contra este último por parte del personal médico bajo su cargo.

Sin embargo, hasta el momento de redactar este artículo no recibimos respuesta a nuestro pedido.