Medios estatales chinos advirtieron de que Pekín podría utilizar las exportaciones de estos materiales vitales para distintas industrias como un arma en su guerra comercial con Washington

Las acciones de tierras raras se dispararon durante la mañana de este miércoles después de que medios estatales chinos advirtieran de que Pekín podría utilizar las exportaciones de estos materiales vitales para distintas industrias como un arma en su guerra comercial con los EE.UU.

producto tierras raras

El valor de las acciones de China Rare Earth Holdings Ltd aumentaron alrededor de un 40 % después de la apertura de la bolsa de Hong Kong antes de retroceder ligeramente a lo largo de la jornada. Por su parte, JL Mag Rare-Earth Co, propietaria de la planta de procesamiento que visitó el presidente Xi Jinping la semana pasada, creció más del 10 %, alcanzando su máximo histórico este miércoles tras varias sesiones consecutivas de subidas.

Otras compañías relacionadas con las tierras raras también obtuvieron ganancias, como China Northern Rare Earth Group High-Tech Co., que creció alrededor de un 9 %, o Xiamen Tungsten Co., que registró un incremento de casi un 5 %.

Más allá de China, las acciones de la empresa australiana Lynas se revalorizaron más de un 15 % en un solo día. Australia es uno de los principales países productores de tierras raras del mundo, con una producción anual de 20.000 toneladas, si bien está muy por detrás de la producción anual china de 120.000 toneladas.

Un as en la manga

Las subidas se producen poco después de que medios chinos como Global Times y People's Daily publicaran que Pekín podría usar esos elementos para contraatacar a Washington. "China está considerando seriamente restringir las exportaciones de tierras raras a EE.UU. Pekín también puede tomar otras contramedidas en el futuro", escribió este martes en su cuenta de Twitter el editor jefe del diario estatal Global Times, Hu Xijin.

En las últimas semanas, distintas voces han sugerido que Pekín podría recurrir a este embargo, cuyo efecto sería muy perjudicial para el país norteamericano, ya que casi no hay fuentes alternativas para esos materiales, que tienen una importancia vital para una amplia gama de industrias, desde las tecnológicas hasta las del ámbito militar.

EE.UU. depende de los suministros de tierras raras de China, que representan un 80 % de sus compras globales de estos materiales. Además, el país asiático produce el 90 % de tierras raras del planeta, un conjunto de 17 metales utilizados en la fabricación de productos tecnológicos como 'smartphones', computadoras, vehículos eléctricos, entre otros, pero igualmente esenciales para la producción de armas modernas como, por ejemplo, los sistemas de guiado de misiles y cazas.

Por este motivo, no resulta sorprendente que este tipo de minerales no fueran incluidos en la lista de los bienes chinos por valor de 200.000 millones de dólares para los cuales Washington aumentó los aranceles de importación.

El enfrentamiento entre EE.UU. y China se ha agravado en las últimas semanas después de que Washington decidiera incluir en su lista negra comercial a Huawei, el gigante chino de las telecomunicaciones, al que acusa de espiar para Pekín, algo que la compañía niega. 

RT, 29.05.2019