Schiphol (Países Bajos), 8 jun (Sputnik).- Los resultados del examen de los restos del piloto del Boeing malasio (vuelo MH17) derribado en el este de Ucrania en 2014, indican a una explosión ocurrida fuera del avión, declaró este martes el juez presidente Hendrik Steenhuis durante las audiencias sobre el accidente aéreo.
 
MH17 crash site sat map  
El Tribunal de Distrito de La Haya (Países Bajos) reanudó las audiencias el 7 de junio.
 
"Durante la autopsia fueron hallados numerosos fragmentos en los cuerpos del piloto A y de su primer ayudante, eran decenas de fragmentos ubicados principalmente en la parte izquierda de los cuerpos. El análisis realizado por el Instituto Forense de Holanda (NFI) determinó que había 11 fragmentos de acero que indican una explosión… Los fragmentos provenían desde el exterior y no eran fragmentos del avión", relató Steenhuis.
 
El fiscal holandés Thijs Berger comunicó durante las audiencias en junio de 2020 que en el cuerpo del capitán del Boeing siniestrado fue encontrado un fragmento en forma de mariposa que tenía más semejanza con un misil Buk del tipo 9?38?1 que con un Buk del tipo 9M38.
 
En tanto, los experimentos llevados a cabo en 2015 por el consorcio ruso Almaz-Antey –fabricante del sistema antiaéreo Buk– demostraron que el Boeing fue alcanzado por un misil 9?38 que no se produce en Rusia desde 1986 y fue 'jubilado' en 2011.
 
Los especialistas de Almaz-Antey excluyeron la posibilidad del ataque con un misil más moderno, el 9?38?1, porque las destrucciones que causa ese tipo de munición no se encontraron en el fuselaje del Boeing malasio.
 
El 17 de julio de 2014, el vuelo MH17 de la compañía Malaysia Airlines, que se dirigía de Ámsterdam a Kuala Lumpur, fue alcanzado por un misil cuando sobrevolaba la provincia de Donetsk, en el este de Ucrania, zona convulsionada por los enfrentamientos entre las tropas ucranianas y las milicias. Los 298 ocupantes de la aeronave, en su mayoría neerlandeses, murieron.
 
El Equipo de Investigación Conjunto (JIT, por sus siglas en inglés), formado por expertos de los Países Bajos, Malasia, Australia, Bélgica y Ucrania, afirma que el misil fue disparado desde un territorio controlado por las milicias de Donbás.
 
La justicia neerlandesa responsabiliza del derribo del avión a tres ciudadanos de Rusia y a un ucraniano que, según la Fiscalía, no apretaron el botón para lanzar el misil, pero cooperaron supuestamente para obtener el sistema antiaéreo Buk y llevarlo al lugar desde donde se produjo el disparo.
 
Al mismo tiempo, los especialistas del consorcio ruso Almaz-Antey insisten en que el misil se lanzó desde un área controlada por el Ejército ucraniano.
 
El presidente ruso, Vladímir Putin, declaró al respecto que Moscú reconocería los resultados de la investigación solo si Rusia lograba participar plenamente en esa labor.
 
Además, recordó que Rusia había propuesto desde un principio llevar a cabo una investigación conjunta, pero su iniciativa fue rechazada, mientras se aceptó la participación de Ucrania que no había cerrado el espacio aéreo sobre la zona de hostilidades. (Sputnik)