La Paz, 12 mar (Sputnik).- Bolivia y Argentina acordaron el jueves poner a la industria del litio en el centro de una nueva etapa de cooperación binacional, facilitada por la afinidad política entre los gobiernos de ambos países, dijeron las autoridades.
 
 

carga electric auto

 

 
"Ambos países queremos tener una cooperación muy amplia de tipo tecnológica, básicamente, que puede derivar después en función de la tecnología (en) una producción conjunta de litio con valor agregado", dijo el canciller argentino Felipe Solá en una rueda de prensa durante una visita oficial a La Paz.
 
Solá hizo la declaración después de firmar una declaración conjunta con su anfitrión Rogelio Mayta, en la que además de la cooperación económica y el litio destacó la reiteración del apoyo argentino al próximo ingreso de Bolivia al Mercado Común del Sur (Mercosur) en condición de socio pleno.
 
"La cuestión es cuáles son las reales posibilidades de industrializar el litio y hacer de esa manera productos de mucho más valor que el litio en sí mismo. Nosotros vamos a ser muy serios en esto", afirmó el canciller argentino al explicar el alcance de la declaración conjunta.
 
Las relaciones económicas entre ambos países en las dos últimas décadas han estado marcadas por el gas natural que Bolivia bombea al vecino sureño en un volumen que ha ido disminuyendo en años recientes, hasta unos 20 millones de metros cúbicos diarios.
 
Bolivia tiene una de las mayores reservas de litio en el mundo, concentrando junto con Argentina y Chile más de dos tercios de los depósitos globales de ese mineral de creciente demanda por su uso en baterías de alta capacidad para automóviles eléctricos.
 
La industria del litio es todavía incipiente en ambos países, operada principalmente por privados en Argentina y en manos del Estado en Bolivia.
 
"Ambos somos productores primarios del litio en distintas formas; nosotros creemos que en Bolivia hay una capacidad tecnológica importante desarrollada, posiblemente con más desarrollo que en Argentina, en la extracción del litio", comentó el visitante.
 
Solá era el primer canciller extranjero que llegaba a La Paz desde la crisis política boliviana de 2019, cuando el gobierno de Evo Morales fue derrocado y sustituido por la administración transitoria de Jeanine Áñez.
 
El canciller argentino repitió varias veces que Buenos Aires nunca reconoció al gobierno de Áñez, poniéndose en cambio al lado de Morales, a quien dio asilo durante casi un año.
 
Sobre el Mercosur, Solá dijo que tenía la esperanza de que el presidente boliviano, Luis Arce, participe en una cumbre de ese grupo programada para fines de marzo en Buenos Aires.
 
La incorporación plena de Bolivia a ese grupo está pendiente solo de la aprobación del Senado de Brasil, después de que fuera aceptada por los congresos de Argentina, Paraguay y Uruguay, los otros tres países miembros. (Sputnik)