Moscú, 13 mar (Sputnik).- La administración de Joe Biden admite que Estados Unidos se ha encontrado en una posición difícil debido al gasoducto Nord Stream 2 ya que busca obstaculizar la implementación del proyecto, pero al mismo tiempo quiere fortalecer las relaciones con Alemania, que defiende el tendido del oleoducto, escribe el periódico Politico citando a funcionarios anónimos.
"Estamos entre la espada y la pared", dijo un alto funcionario de la administración.
También, según las fuentes, la administración está preparando otra tanda de sanciones contra empresas asociadas con Nord Stream 2.
El medio señala que la Administración debe presentar un informe al Congreso cada 90 días, indicando las organizaciones involucradas en la construcción del oleoducto que están sujetas a sanciones. Ahora buscan nuevas compañías sujetas a sanciones que serían mencionadas en el próximo informe en mayo.
"Siempre estamos monitoreando la actividad en torno al oleoducto que puede estar sujeta a sanciones, por lo que si vemos actividad que cumple con este criterio, estamos dispuestos a aplicar la ley", dijo al diario el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.
A principios de marzo, un grupo de republicanos de la Cámara de Representantes envió al secretario de Estado, Antony Blinken, una carta instando a la administración a presentar al Congreso nuevas designaciones de sanciones relacionadas con el Nord Stream 2 lo antes posible en lugar de esperar hasta el 17 de mayo, cuando finaliza el actual período de informes de 90 días.
Nord Stream 2 es un proyecto conjunto de la compañía de energía rusa Gazprom y cinco socios europeos, cuyo objetivo es la construcción de un gasoducto gemelo para entregar gas ruso a Alemania a través del Mar Báltico.
El proyecto es blanco de críticas y sanciones por parte de Estados Unidos, que lo califica como una amenaza para la seguridad energética de Europa y Ucrania. (Sputnik)
