“Sino” y “si no”

En el suplemento deportivo de Deporte Total, del diario El Comercio del día 26 de setiembre de 2009, en la nota “Será un aniversario”, leemos:

“Los jugadores […] le dedicarán el partido a su  capitán y anhelan que se transforme en un triunfo que los ponga en el primer lugar no solo del grupo A, si no del acumulado de los 16 equipos profesionales del Perú […].”

En la misma publicación, en “Seguro contra robos”, tenemos:

“[…] el joven técnico no tendría problemas en aceptar que Fernando Oblitas permanezca como asistente, pero también pidió que contraten a Norberto Solano, jugador importante no solo por su trayectoria si no por su liderazgo para manejar el plantel.”

 


Estos dos ejemplos de “si no” por “sino” demuestran que el error está extendido. ¿Cómo saber cuándo poner “sino” o “si no”? Para saber si corresponde “sino”, una buena señal es que previamente haya “no” (que marcamos con color).

Se pone “si no” cuando la idea no es de oposición sino de condicionalidad (expresada por “si”). Ejemplo correcto de “si no”: “El entusiasmo se impone muchas veces a la adversidad; mira, si no, la prosperidad en que vive ese laborioso joven”. En este caso debemos notar tres cosas: a) ausencia de “no” (que, como hemos visto, es precursor de “sino”), b) se prefiere poner “si no” entre comas; c) existe una elipsis (supresión) verbal, de modo que sin suprimir nada la oración sería “El entusiasmo se impone muchas veces a la adversidad; mira, si no crees, la prosperidad en que vive ese laborioso joven”, donde ponemos el verbo suprimido (“crees”) en la oración inicial, que es correcta.

Los párrafos citados deben quedar de la siguiente manera:

“Los jugadores […] le dedicarán el partido a su  capitán y anhelan que se transforme en un triunfo que los ponga en el primer lugar no solo del grupo A, sino del acumulado de los 16 equipos profesionales del Perú […].”

“[…] el joven técnico no tendría problemas en aceptar que Fernando Oblitas permanezca como asistente, y también pidió que contraten a Norberto Solano, jugador importante no solo por su trayectoria sino por su liderazgo para manejar el plantel.”

En el segundo ejemplo hemos sustituido la conjunción “pero “por “y”, pues el contexto no sugiere idea de oposición o contraposición, que se expresa con “pero”.