Dos pelos serían la pista de un yeti

Dos pelos, llevados a la universidad de Oxford, para exámenes de laboratorio de su ADN, serían la mejor evidencia de la existencia de los célebres yetis en la India, según expertos.


Los pelos —de 33mm y 44mm de largo— fueron recogidos hace cinco años en la espesa selva de Garo, en las montañas situadas al noreste de la India, después que un forastero manifestara haber visto por tres días a un yeti o barung —como se le llama en la India— que rompía las ramas de los árboles y comía su savia.

Los análisis de los pelos, realizados en la Oxford, no han podido establecer la identidad de la especie del animal, pero señalaron que presentan un asombroso parecido a los pelos traídos de los Himalayas por Sir Edmund Hillary hace un siglo.

En declaraciones para el diario británico Independent, el experto en simios, Ian Redmond, quien coordina con los investigadores, dijo que “los pelos son la evidencia más positiva que hay de que el yeti posiblemente exista”.

Los análisis, todavía preliminares, han entusiasmado a lo especialistas, quienes indican que todavía serán necesarias más pruebas. Esta primera parte de los exámenes ha consistido del análisis microscópico de los pelos y su comparación con todas las especies conocidas en la zona del hallazgo. La siguiente fase será una prueba óptica con un microscopio mucho más potente, para después pasar a la prueba del ADN, que se realizará en dos laboratorios distintos: Oxford y Cardiff.

Las muestras encontradas incluyen folículos de la base de los pelos, lo que alienta todavía más a los expertos, quienes explicaron que si los análisis de ADN no llegan a identificar a la criatura, podría deducirse que pertenecen a un primate desconocido, aunque no sea a un yeti.

Los pobladores de las colinas de Garo creen en la existencia del yeti. En el lugar hay reiterados reportes de avistamiento de yetis y de sus huellas, incluyendo las que vieron famosos montañistas como Lord Hunt, quien condujo una expedición al Everest.