Persiste represión policial en Egipto en sexta jornada de manifestaciones contra Junta Militar

En una sexta jornada de manifestaciones en Egipto, fuerzas del orden utilizaron gases lacrimógenos para tratar nuevamente de dispersar a los manifestantes que permanecen en la plaza Tahrir de El Cairo solicitando que la Junta Militar entregue el poder a un gobierno civil. Hasta ahora el Gobierno cifra en 35 los muertos por la represión policial, mientras que otras fuentes afirman que han fallecidos entre 37 y 40 personas.

El corresponsal de Prensa Latina en Egipto, Ulises Canales, informó que según datos actualizados del Ministerio de Salud de Egipto, el número de fallecidos por la represión de las fuerzas antimotines a manifestantes alcanzó la cifra de 35 este miércoles, mientras que la cantidad de heridos se estima en más de mil 700.

“La policía sigue asediando a los manifestantes y lanzandoles gases lacrimógenos, en algunas partes no se puede respirar a causa del ambiente irritante. Los heridos están siendo atendidos en hospitales de campañas y otros son llevados a hospitales de la ciudad", añadió Canales.

Asimismo destacó quie “el Ejército tuvo que asumir por su propia cuenta la protección del Ministerio del Interior, en cuyos alrededores se focaliza ahora la acción más violenta de la policía contra los inconformes que están acampados en la plaza Tahrir que queda a escasos metros del Ministerio”.

El periodista resaltó que la tensión se mantiene no sólo en El Cairo, sino también en otras ciudades egipcias, porque las personas se niegan a aceptar la variante de solución que el martes presentó el jefe Supremo de las Fuerzas Armadas, Mohamed Hussein Tantaui.

Canales señaló que los egipcios cuestionan que haga falta un referendo para legitimar o no la permanencia en el poder de una Junta Militar que fue designada “prácticamente por Hosni Mubarak poco antes de dejar el poder”.

Ulises Canales reportó que los manifestante afirmaron que si se crea un gobierno de seguridad o de salvación nacional creíble no hace falta que los militares estén incidiendo en la política del país.

El aspirante a la presidencia, Amr Moussa, condenó la violencia y abogó por una transición pacífica y democrática “esperamos que la violencia llegue a su fin pronto nuestros jóvenes en la plaza Tahrir tienen derecho a expresar libremente sus opiniones, sin que se registren ataques a edificios públicos”.

Moussa señaló que no hay justificación para el uso de la violencia y el número de personas asesinadas “que se convirtieron en mártires y heridos (...) Esta situación tiene que llegar a su fin porque es inaceptable”.

La situación en El Cairo es “inamovible”, según indicó Canales, porque las personas que permanecen en la plaza Tahrir desde el pasado viernes, aseguran que no desalojarán el lugar hasta que no haya una respuesta satisfactoria a sus demandas, que es principalmente que la Junta Militar abandone el poder.

Los egipcios acusan los militares de la matanza de manifestantes y de querer perpetuarse en el poder, pese a las promesas de elecciones presidenciales para mediados de 2012 y la disposición de realizar un referendo sobre la permanencia de los oficiales en el poder.

Telesur.