La Secretaria de Estado, Hillary Clinton, realizó su primera visita a Egipto desde la elección del Presidente egipcio Mohamed Morsi, el mes pasado. El fin de semana, Clinton mantuvo conversaciones separadas con Morsi y con el director del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas de Egipto, Hussein Tantawi. Clinton sostuvo que fue a Egipto a apoyar la transición democrática del país.

 

La Secretaria de Estado, Hillary Clinton, declaró: “La democracia es difícil. Hemos estado en ello durante más de 236 años y exige diálogo, transigencia y política de verdad. Estamos estimulados y queremos ayudar pero sabemos que decidir no le corresponde a Estados Unidos, sino al pueblo egipcio”.

Clinton afrontó una serie de protestas durante su visita, ya que hay recuerdos muy patentes de su apoyo público al Presidente derrocado Hosni Mubarak, cuando comenzó el levantamiento contra él el año pasado. La caravana de vehículos de Clinton fue atacada con proyectiles cuando se dirigía a la ciudad de Alejandría el sábado. En El Cairo, el ex prisionero de Bahía de Guantánamo, Sami Abdul Aziz, participó en una protesta contra Clinton para solicitar una compensación para las víctimas de tortura de Estados Unidos.

Sami Abdul Aziz afirmó: “Los estadounidenses me encarcelaron en Guantánamo durante cuatro años, me torturaron y me destrozaron. El tribunal militar me consideró inocente de sus acusaciones y tengo derecho a exigir una compensación tras cuatro años de tortura”.