El nuevo misil de largo alcance demostró el funcionamiento de sus sensores de detección de objetivos

 

EE.UU. desarrolla un nuevo sistema de misiles antibuque de gran alcance, para ser lanzados desde aeronaves. Los primeros ensayos resultaron exitosos. Lockheed Martin efectuó la primera prueba de sensores del misil de largo alcance (LRASM, por sus siglas en inglés) durante su lanzamiento cerca de la costa de Florida desde una aeronave modificada Sabreliner.

 

 

 

El objetivo del ensayo fue probar los sistemas de detección, clasificación e identificación de objetivos en un vuelo a distintas alturas y con un amplio rango de velocidades. El misil pudo detectar y clasificar todos los objetivos.

 

 

El LRASM se desarrolla bajo el auspicio de la agencia estatal de proyectos en el ámbito de tecnologías bélicas (DARPA). El punto de partida es el misil de crucero AGM-158 JASSM aire-superficie, en servicio operativo del Pentágono.

 

 

El sistema de sensores del LRASM incorpora un dispositivo de radiofrecuencia, para detectar buques en la superficie acuática, un canal de comunicación con el puesto de mando, así como un sistema de rastreo electro-óptico para la identificación de potenciales objetivos y el guiado preciso del misil en la fase terminal de su vuelo. Asimismo, usa un módulo digital de GPS, protegido de interferencias, para detectar y destruir buques concretos que integren una flota.

 

 

Además, el LRASM está dotado de sensores que le proporcionan características de invisibilidad para radares enemigos y por consiguiente la sobrevivencia a velocidades de crucero subsónicas.

 

 

Las características técnicas del LRASM todavía no se dieron a conocer, pero se sabe que los misiles antibuque AGM-158 JASSM portan una ojiva de 450 kilos y tienen un alcance de hasta 980 kilómetros.

Russia Today en Español, 18-07-2012