En Yemen, miles de dolientes se reunieron en la ciudad de Saada el lunes para asistir a los funerales de las 51 personas –entre ellas 40 niños– que murieron la semana pasada a raíz de un ataque aéreo que tuvo como blanco un autobús escolar. El bombardeo aéreo fue llevado a cabo por la coalición encabezada por Arabia Saudí, que cuenta con el respaldo de Estados Unidos. Las imágenes publicadas en línea sugieren que en el ataque aéreo se utilizó una bomba Mark-82, fabricada en Estados Unidos. Los dolientes condenaron el ataque a los escolares.

Mohamed Galhem, señaló: “Los crímenes que fueron cometidos por la coalición [encabezada por Arabia Saudí] contra los niños en Dahyan son crímenes sin precedentes, que nunca antes habían sucedido, crímenes que no serán perdonados por la historia ni por la humanidad. Un crimen que nunca antes le ha sucedido a nadie; ni a los sijs, ni a los indios ni a los bengalíes. Un crimen cometido por las manos sucias de [el rey de Arabia Saudí, Abdelaziz] al-Saud y [el presidente de los Emiratos Árabes Unidos, el jeque Jalifa bin Zayed] al-Nahyan contra los niños de Yemen”.

 

Democracy Now, 14.08.2018