Corea del Sur destaca la necesidad de importar crudo de Irán, pese a la amenaza de EE.UU. de sancionar a los que compren petróleo persa a partir de mayo.

A través de un comunicado, la Cancillería surcoreana ha señalado este lunes que Seúl ha mantenido contactos a todo nivel con Washington para convencerlo de extender la exención que permite a ocho países importar hasta fines de este mes crudo persa sin enfrentar las sanciones norteamericanas. Conforme a la Casa Blanca, el objetivo de la medida es reducir a cero las exportaciones de petróleo de Irán.

Una bandera nacional iraní, junto a una llama de gas en una plataforma de producción de petróleo.

De acuerdo con la nota, citada por la agencia de noticias local Yonhap, Corea del Sur defiende que depende en gran medida del condensado iraní para producir productos petroquímicos.

En este contexto, señala el medio, a principios de mes, el ministro de Economía y Finanzas surcoreano, Hong Nam-ki, sostuvo conversaciones con el secretario del Tesoro estadounidense, Steven Mnuchin, sobre la posible prórroga a la exención.

El anuncio de Washington contra el crudo persa, que ha provocado la subida del precio del petróleo a nivel mundial, ha recibido la condena de China y Turquía. La República Islámica, por su parte, ha enfatizado que la decisión de Trump carece de valor alguno, pero tomará medidas apropiadas al respecto.

La revista estadounidense Foreign Policy ha asegurado en un artículo que Washington no puede llegar a su objetivo de llevar a cero la venta de crudo iraní y ha alertado que la medida de Trump puede provocar un repunte en las tensiones entre EE.UU. y la Unión Europea (UE).

Del mismo modo, el medio norteamericano adelanta que los principales importadores del crudo de Irán no van a acatar la reciente exigencia estadounidense, como es el caso de Turquía, mientras que otros, entre ellos China y La India, podrían seguir con sus compras de petróleo persa de manera no oficial.

 

Hispantv, 23.04.2019