Crimen conmociona a Brasil. Rosana Candido, de 27 años, y su amante lesbiana Kacyla Pessoa, de 28 años, arrancaron el pene a Grizzly, hijo de nueve años de la primera, antes de decapitarlo porque le recordó a su padre.

 

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Rosana Candido, de 27 años, y Kacyla Pessoa, de 28, también supuestamente cosieron un falso órgano sexual femenino en el cuerpo porque “quería ser una niña” antes de arrancarle la piel al chico. También intentaron sacarle los ojos con un cuchillo y la madre Cándido apuñaló a su hijo Rhuan una docena de veces.

El niño fue asesinado y mutilado en su casa en Samambaia, a unas 20 millas de la capital, Brasilia.

La madre huyó con el niño después de que su padre, quien vive en Acre, cerca del Perú, perdió la custodia hace cinco años.

Después de cometer el asesinato de Grizzly, y apuñalarlo una docena de veces, se dice que la pareja fracasó en el intento de ocultar el cuerpo, informa la prensa local.

Las asesina quemaron algunos restos de la víctima en una barbacoa y guardaron otras partes en una maleta y los arrojaron a una alcantarilla, según la policía. Otras partes del cuerpo estaban escondidas en dos mochilas en la casa de la pareja.

Ambas han confesado el asesinato y enfrentan cargos de homicidio, tortura y ocultamiento de un cadáver.

Se dice que las dos mujeres les dijeron a los investigadores que usaron “herramientas rudimentarias” porque Rhuan “quería ser una niña”, aunque probablemente esta sea un argumento para reducir su pena.

Al parecer, el muchacho era una carga y un obstáculo para la relación lésbica.

El jefe de policía Guilherme Melo dijo que la crueldad del crimen había conmocionado a los investigadores. “Mató a su hijo, descuartizado, decapitado, arrancó la piel y trató de deshacerse del cuerpo. Fue un caso muy terrible”, dijo a O Tempo.

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