China ha impuesto la cuarentena en una ciudad de 10 millones de personas por temor a que haya otra ola de casos de coronavirus. Harbin, la ciudad más grande de la provincia de Heilongjiang, ha prohibido a todos los extranjeros ingresar a zonas residenciales.
A principios de este mes, la ciudad ordenó 28 días de cuarentena para cualquier persona que llegara del extranjero, con dos pruebas de ácido nucleico y una prueba de anticuerpos para cada una. La ciudad también estableció bloqueos de 14 días para residencias donde se encuentran casos confirmados y asintomáticos.
Heilongjiang ha estado a la vanguardia de los últimos esfuerzos de China para identificar a los ciudadanos infectados que llegan de la cercana Rusia para frenar la propagación del virus.
El gobierno de la ciudad que todos los casos confirmados, casos sospechosos, contactos cercanos de personas asintomáticas y contactos cercanos de contactos cercanos deben ser puestos en cuarentena y probados.
Harbin se centró en un hombre de 87 años llamado Chen que había estado en dos hospitales desde el 2 de abril, cuatro días después de cenar en casa con los amigos de su hijo, dos de los cuales luego dieron positivo. Para el martes, Chen había infectado a 78 personas, con 55 confirmadas, aunque 23 que dieron positivo aún no han mostrado síntomas de virus.
Los infectados eran principalmente miembros de la familia, pacientes del hospital y sus familias, y médicos y enfermeras en contacto directo o indirecto, dijeron funcionarios de salud provinciales. De los siete nuevos casos confirmados en Heilongjiang el martes, cuatro eran pacientes que habían permanecido en la misma sala que Chen, mientras que tres eran trabajadores de la salud en un hospital.
El virus que infectó el grupo viajó más allá de la provincia, y los funcionarios de salud en la vecina Liaoning informaron el 16 de abril de un caso confirmado cuyo padre se había quedado en el mismo hospital que Chen. Un grupo de casos de coronavirus en la ciudad de Harbin, en el noreste de China, ha obligado a los funcionarios a endurecer las restricciones a los movimientos en la frontera con Rusia, informa el diario británico Metro.
El lunes, la región norte de Mongolia Interior denunció un caso confirmado en una persona que se había quedado en uno de los hospitales de Harbin al mismo tiempo que Chen y el paciente de Liaoning. Sun, residente de Harbin, de 34 años, dijo: “Ya no llevaré a mi hija o mis padres afuera. Si necesitamos alimentos o vegetales, simplemente dejamos que mi esposo los compre cuando regrese. Y cada vez que alguien tiene que salir, él o ella dejarán sus zapatos fuera de la puerta para evitar traer virus”. Harbin informó que tres viajeros infectados llegaron de Rusia. Se observa a unas 1,400 personas en busca de signos del virus.
Zhang, un funcionario que vive en la ciudad de Mishan, en el extremo este de Heilongjiang, dijo: “Las medidas de prevención han sido más estrictas recientemente, y no se permitirá que personas de Mudanjiang o Harbin entren a nuestra ciudad”. China continental informó 30 nuevos El martes se confirmaron casos, 23 de ellos importados, que involucraron a viajeros del extranjero, frente a los 11 del día anterior. El recuento de casos confirmados en China continental es de 82,788, con 4,632 muertes.
