Amenazan “significativamente” las esperanzas de una cura, dice el FBI

Hackers vinculados con el estado chino están entrando en organizaciones estadounidenses que realizan investigaciones sobre el coronavirus COVID-19, dijeron funcionarios estadounidenses, quienes advirtieron a los científicos y a los funcionarios de salud pública para estar atentos al robo cibernético.

 

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En una declaración conjunta, la Oficina Federal de Investigaciones y el Departamento de Seguridad Nacional dijeron que el FBI estaba investigando robos digitales en organizaciones estadounidenses por parte de “actores cibernéticos” vinculados a China que había monitorizado “intentando identificar y obtener ilícitamente valiosa propiedad intelectual (IP) y datos de salud pública relacionados con vacunas, tratamientos y pruebas de redes y personal afiliado a la investigación relacionada con el COVID-19”.

La declaración no ofreció más detalles sobre las identidades de los objetivos o los piratas informáticos, informa la prensa estadounidense.

El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, dijo: “¿Qué más hay de nuevo con China? ¿Qué más hay de nuevo? Dime. No estoy contento con China”, cuando los informes sobre la advertencia circularon por primera vez el lunes.

Como era de esperar, la embajada china en Washington condenó las acusaciones como “mentiras”. “El FBI emitió una advertencia basada en la presunción de culpabilidad y sin ninguna evidencia”, dijo la embajada en una declaración escrita, agregando que la acusación de Estados Unidos “socava la cooperación internacional en curso contra la pandemia”.

La investigación y los datos relacionados con el coronavirus han surgido como una prioridad de inteligencia clave para los piratas informáticos de todas las tendencias y las organizaciones de inteligencia occidentales han dado repetidamente la alarma sobre el objetivo de las organizaciones farmacéuticas y de salud pública.

En un comunicado separado emitido el miércoles, el jefe de la agencia de inteligencia de señales de Nueva Zelanda dijo que condenaba cualquier intento de atacar la infraestructura relacionada con la respuesta al COVID.

“Hacemos un llamado a todos los actores cibernéticos para que se abstengan de actividades que puedan poner en peligro las respuestas nacionales o internacionales a la pandemia de COVID-19”, dijo Andrew Hampton, director general de la Oficina de Seguridad de Comunicaciones del Gobierno de Nueva Zelanda.

Estados Unidos también se ha quejado de que China ha estado involucrada en el robo de tecnología durante algún tiempo, robando secretos comerciales para fortalecer su economía.

El FBI y la agencia de seguridad cibernética dijeron que estaban emitiendo la alerta para crear conciencia sobre la posible amenaza y dijeron que se darán a conocer detalles técnicos adicionales en los próximos días.

A principios de este mes, un documento de Five Eyes de 15 páginas reveló que China mintió al mundo sobre el coronavirus al encubrir la epidemia de coronavirus.

El dossier, de las agencias de inteligencia Five Eyes de EE. UU., Canadá, Reino Unido, Australia y Nueva Zelanda, declaró que el secreto de China en torno al virus condujo a un “ataque a la transparencia internacional”.

Decía: “A pesar de la evidencia de transmisión humano-humano desde principios de diciembre, las autoridades de China lo niegan hasta el 20 de enero.

“La Organización Mundial de la Salud hace lo mismo. Sin embargo, los funcionarios en Taiwán expresaron sus preocupaciones el 31 de diciembre, al igual que los expertos en Hong Kong el 4 de enero”.