Moscú, 4 mar (Sputnik).- Al menos 54 personas fallecieron y más de 1.700 fueron detenidas de manera arbitraria en Birmania desde que los militares de ese país asiático dieran un golpe de Estado en febrero pasado, comunicó la oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos (Acnudh).
"La oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos tiene una información corroborada de que al menos 54 personas fueron asesinadas por los agentes de la policía o militares desde el golpe de Estado del 1 de febrero", dice el comunicado.
La nota indica que "el balance de muertos actual podría ser mucho mayor que las cifras que la oficina pudo verificar".
"Desde el 1 de febrero, más de 1.700 personas fueron arrestadas o detenidas arbitrariamente por su participación en las protestas o implicación en la actividad política", agrega el texto.
El Acnudh precisó que entre los detenidos están "miembros del Parlamento, activistas políticos, funcionarios de organismos electorales, autores, defensores de derechos humanos, profesores, trabajadores de salud, funcionarios públicos, periodistas, monjes y celebridades".
Además, al menos 29 periodistas fueron arrestados en los últimos días, incluidas ocho mujeres.
"Los militares de Birmania deben cesar asesinatos y detenciones de manifestantes, (...) es totalmente abominable que las fuerzas de seguridad abran fuego real contra manifestantes pacíficos", declaró la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Michelle Bachelet, citada en el comunicado.
Bachelet también se mostró "horrorizada por los ataques documentados contra el personal médico de emergencia y ambulancias que intentaban ayudar a los heridos".
"Urjo a todos con información e influencia –incluidos funcionarios de Birmania que ahora se suman al movimiento de la desobediencia civil– a apoyar los intentos internacionales para responsabilizar a los líderes militares por graves violaciones de los derechos humanos", subrayó. (Sputnik)