Roma, 19 mar (Sputnik).- El primer ministro italiano, Mario Draghi, no descartó que su país compre la vacuna anticovid rusa Sputnik V en ausencia de coordinación en la Unión Europea.
"¿Podría Alemania usar la vacuna Sputnik V de Rusia pendiente de la aprobación de la EMA? Estoy de acuerdo. Si la coordinación europea no funciona, tenemos que hacerlo solos", dijo Draghi este viernes en una rueda de prensa.
Estas declaraciones se producen poco después de que la canciller alemana, Angela Merkel, abogó por usar la vacuna rusa si esta es autorizada por la Agencia Europea de Medicamentos (EMA). Al subrayar que preferiría "adquisiciones europeas", la canciller afirmó que si estas no se llevan a cabo, "deberemos emprender nuestro camino alemán a solas".
En línea con las palabras de su homóloga germana, el jefe del Ejecutivo italiano destacó la importancia de la coordinación europea, pero advirtió que a falta de la misma, los países podrían tomar sus propias decisiones.
"La coordinación europea es la principal vía para buscar vacunas. Si la UE continúa trabajando con la Sputnik V, está bien, de lo contrario el proceso marchará de distinta manera", puntualizó.
Para Draghi, la coordinación europea debe enfocarse con pragmatismo: si es imposible mantenerla, se podrían buscar "otras vías" para la adquisición de vacunas.
La vacuna rusa Sputnik V se somete desde el 4 de marzo a examen en la EMA. Anteriormente, el regulador europeo expresó la esperanza de que la evaluación del fármaco se realice en un plazo acelerado, pero aún sin precisar la fecha de la aprobación del fármaco.
Desarrollada por el Centro Gamaleya y aprobada en Rusia el 11 de agosto de 2020, la Sputnik V se convirtió en la primera vacuna anticovid registrada en el mundo.
A principios de febrero, la revista científica británica The Lancet publicó los resultados del ensayo clínico de fase III con la vacuna rusa, que confirman una seguridad y eficacia del 91,6 por ciento. El fármaco consta de dos dosis aplicadas con un intervalo de 21 días: la primera se basa en el adenovirus humano tipo 26 y la segunda, en el adenovirus humano recombinante del tipo 5.
Hasta la fecha, la vacuna Sputnik V ha sido autorizada en más de 50 países, entre ellos dos Estados miembros de la Unión Europea (Eslovaquia y Hungría), así como en Argentina, Bolivia, Guatemala, Guyana, Honduras, México, Nicaragua, Paraguay, San Vicente y las Granadinas y Venezuela. (Sputnik)