Bilbao (España), 27 mar (Sputnik).- Las autoridades sanitarias españolas exigirán desde este sábado una prueba PCR a todos los viajeros que procedan de Francia por vía terrestre, lo que se suma a la exigencia vigente de solicitarla a los que lleguen por avión o barco.
 
hisopado coronavirus  
"En base a la evolución de la situación epidemiológica y aplicando criterios de reciprocidad se considera preciso aplicar también esta media a las personas que quieran entrar a España por vía terrestre", informa el Boletín Oficial del Estado (BOE) español de este sábado.
 
La publicación oficial recuerda, no obstante, que antes de establecer esta nueva restricción que "a todos los pasajeros procedentes de Francia, por vía aérea o marítima, se viene exigiendo una prueba diagnóstica de infección activa para SARS-CoV-2 con resultado negativo, realizada en las setenta y dos horas previas a la llegada a España".
 
La medida pretende reducir la llegada masiva de turistas prevista para las dos próximas semanas vacacionales de la Semana Santa.
 
En este sentido, la ministra española de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ya pidió el pasado miércoles a los turistas extranjeros que tengan planeado visitar España en estas próximas dos semanas que no lo hagan.
 
"Estamos recomendando que no haya viajes, tanto a los españoles como en los países que nos envían viajeros. Estamos diciendo que no vengan, pero lo dice también el Gobierno alemán y el francés", dijo Maroto en una intervención en el Hospitality Innovation Planet (HIP), el primer evento realizado durante la pandemia en el recinto ferial madrileño de Ifema, orientado al sector de la hostelería.
 
En la última semana, se ha vivido una intensa polémica en España debido a la prohibición de la movilidad para los ciudadanos nacionales para la Semana Santa; al mismo tiempo que se permitía la llegada de turistas del área Schengen a los principales destinos turísticos por avión y con el único requisito de una prueba negativa.
 
Las autoridades españolas pretenden reducir los contactos sociales en los tradicionales días festivos de la Semana Santa en los que se multiplican los desplazamientos, ante el temor a que se produzca una cuarta ola del coronavirus, como ocurrió con anterioridad tras el periodo navideño y cuando solo se ha vacunado a 2,5 millones de personas frente a los 47 millones de habitantes del país, según los últimos datos oficiales difundidos el viernes.
 
En este sentido, en la jornada del viernes, ya fueron dos regiones, País Vasco y Navarra, las que anunciaron restricciones a la movilidad y a la actividad de bares y restaurantes en la jornada del viernes, en consonancia con las recomendaciones expresadas también en la jornada del viernes por la estatal Comisión de Salud Pública, lo que hace prever que en las próximas jornadas serán más territorios los que se adhieran a esta recomendación estatal, como ocurrió en ocasiones anteriores. (Sputnik)