Irán ha acusado a Israel de “terrorismo nuclear” después de un ataque cibernético hoy en una de sus plantas nucleares, informa The Sun.

 

planta nuclear Natantz

Planta nuclear de Natanz. Hispantv

 

El jefe de la Organización de Energía Atómica de Irán (OEAI), Ali Akbar Salehi, ha considerado un “acto terrorista y a la desesperada” el incidente ocurrido la madrugada de la jornada de hoy en la red de distribución eléctrica de la planta nuclear de Natanz, situada en el centro del país, que, según su portavoz, Behruz Kamalvandi, no causó ni daños ni contaminación.

“La República Islámica de Irán condena este acto a la desesperada, e insta a la comunidad internacional y a la Agencia Internacional de Energía Atómica [AIEA] a lidiar con ese terrorismo nuclear, al tiempo que se reserva el derecho a tomar medidas contra los perpetradores y autores intelectuales de dicho sabotaje”, ha subrayado Salehi en Hispantv.

Este suceso se ha producido un día después de que Teherán exhibiera más de un centenar de nuevos logros en materia nuclear con motivo del Día Nacional de la Tecnología Nuclear; entre los proyectos figuraba la instalación de un conjunto de 164 centrifugadoras avanzadas IR-6 en Natanz.

Salehi ha dicho que este reciente acto de sabotaje en Natanz pone al descubierto el fracaso de quienes trabajan denodadamente para detener el creciente desarrollo de la industria nuclear de Irán, y descarrilar los diálogos entre Teherán y las cinco potencias mundiales que tienen lugar en Viena (Austria) para levantar las crueles sanciones que pesan contra el país persa.

Sin embargo, el jefe de la OEAI ha asegurado que Irán seguirá trabajando con seriedad para impulsar el desarrollo de su programa nuclear con fines pacíficos y para el levantamiento de las sanciones inhumanas impuestas por EE.UU. en su contra.

En julio de 2020, la instalación nuclear de Natanz fue blanco de otro acto de sabotaje cuando se produjo un incendio en uno de sus pabellones en construcción y, conforme aseveró la OEAI en aquel entonces, no dejó víctimas, ni interrumpió las actividades en curso en la planta de enriquecimiento de uranio y sus centrifugadoras.

Días después de dicho incidente, Teherán advirtió que los posibles elementos extranjeros involucrados en el mismo no saldrían bien parados.

La misión iraní ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) alertó, por su parte, en aquellas fechas, que cualquier sabotaje en los centros nucleares o infraestructuras de Irán podría dar pie a una escalada de dimensiones inimaginables.

Aunque no se ha reportado el grupo o individuo detrás del acto de sabotaje en Natanz, anteriormente los servicios de inteligencia de Estados Unidos e Israel, mediante ataques cibernéticos y asesinatos de científicos nucleares de la República Islámica, han tratado, sin éxito alguno, torpedear el programa nuclear iraní.