Salvar la crisis, pero no a sus responsables
Xavier Caño (*)
“La crisis financiera podría intensificarse con nuevos perjuicios para los bancos que poseen valores de EEUU”, afirma un reciente informe del Fondo Monetario Internacional (FMI). Y ha calculado que entre los préstamos hipotecarios de alto riesgo, el descenso de precios de viviendas, el aumento de la morosidad y los perjuicios que todo ha transferido a otro tipo de préstamos, las pérdidas causadas por la crisis ascienden a 945.000 millones de dólares. Un capital que financiaría quince o veinte Objetivos del Milenio si hubiera voluntad de hacerlo. Pero no es capital solidario, claro, son pérdidas. Pérdidas fruto de la imprudencia, la codicia desmedida, la pésima gestión y la absoluta falta de control del mundo financiero.