Turba de Fujimoristas y Alanistas se disfrazan de Ollantistas

El plan “violentista” de la derecha fujialanista al descubierto.

El día viernes en horas de la noche, saliendo del programa “la Hora del Canal N”, supuestos simpatizantes ollantistas atacaron al periodista fujimorista Jaime de Althaus, un ataque por cierto sospechoso. En esta coyuntura política, a ningún candidato le es favorable mostrar algún signo de violencia que será aprovechado por su rival y la opinión pública para satanizar como violentista e intolerantes ante la “libertad de expresión” y así menoscabar su posibilidad de salir ganador en las urnas del 5 de Junio.

 

Sin embargo, este seria la táctica de uno de los candidatos para deslegitimar al rival que tiene más opción de salir ganador. Según informaciones confidenciales del entorno de Keiko Fujimori, la idea maquiavélica habría salido desde la celda dorada del DIROES con los intercambios de información desde la Base Naval (Montesinos) [la renuncia de Raffo se debe a la influencia de éste ultimo] El plan consiste en realizar ataques sistemáticos a individuos cuya opinión pública es abiertamente antiollantistas y profujimorista, para la cual grupos de fujimoristas y alanistas extremistas se movilizaran ataviados de ollantistas para perpetrar dichos agresiones y tendrían algunos infiltrados provocadores en las filas de “Gana Perú”. Dentro de este plan la “primera victima” en sufrir este ataque fue Jaime de Althaus, fujimorista convicto y confeso, luego seguirían el fujimorista Jaime Beyli, entre otras del medio periodístico fujimoristas como el talibán Aldo Mariategui, el plan incluye también una serie de ataques a locales de los editoriales de El Comercio, diario Peru21, El Correo, incluso locales de las televisoras como Canal 2, canal 4 y otros con incidencia pro-fujimorista. Incluso, éstos tendrían conocimiento para salvaguardar sus bienes y seguridad.

No solo los medios afines al fujimorismo estarían en blanco de ese plan mafioso sino también realizar supuestas “agresiones” en los mítines de Keiko como se fueran actos violentas de Ollantistas, como habría sido la agresión al mafioso menor Kenyi del clan Fujimori en Juliaca el mes pasado y últimamente en Satipo a Keiko. Un plan casi perfecto que tiene un nombre y apellido pero que se quiere pasar como se fuera la labor de otros.

El plan siniestro cumple los propósitos de deslegitimar al candidato de “Gana Perú” como una opción, en inclinar la balanza de los indecisos hacia al fujimorismo, al ser presentado Ollanta con estos hechos como intolerare, violentista, que no respeta la libertad de expresión, que amenaza a la democracia y al estado de derecho, chavista como ya declaro  Altahus haciéndose la víctima. Luego harán declaraciones rimbombantes, la candidata del Fuji-montesinismo condenando estos hechos para presentarse como candidata “demócrata” que respeta la libertad de expresión, así mismo los programas fujimoristas y todos los medios harán sendos pronunciamientos deplorando estos actos que “empañan el proceso democrático”, las declaraciones de García Pérez, será parte de esta montaje en la cual es partícipe.

Ante estos hechos Ollanta no tiene capacidad de respuesta de inclinar la contracampaña para beneficio suyo, ha llegado a un techo y repetir los errores del 2006 que lo hacen impredecible y vulnerable (ejemplo, después del 10 de abril se mostró abierto al dialogo, dispuesto a alianzas y ciertas concesiones que fue bienvenida pero luego hubo una regresión en esa propuesta que lo ha estancado en su posibilidades con camino a baja), contribuyendo a una imagen negativa y más dudas ante que convencer a la población indecisa que espera más de Ollanta pero que ya no encuentra mayores argumentos, mientras la taimada Keiko aprovecha cada error. Los resultados de las encuestas es un reflejo.