Desde hace una década, Isabel, católica, madre de una hija estudiante, residente en España, señala que recibe una mensaje cada mes, desde el 7 julio de 2014. Los mensajes son revisados por su director espiritual y el obispo local indicó que se le informe de cada uno de ellos.
Es decir, los mensajes son aprobados por la diócesis y publicados en el portal pastorsupremo.es, que mantiene anónimo el nombre completo de Isabel, quien sigue una regla de vida aprobada por los religiosos de la comunidad formada en torno a estos mensajes a través de sueños, llamada Getsemaní, en la cual ella participa y en la que ayudan varios sacerdotes.
Entre los mensajes tenemos estos dos:
El 9 de noviembre de 2016
Vio un ambiente de fiestas navideñas y una iglesia, un funeral con repique de campanas por diversos sitios y que decían “funeral de estado” en todas las televisoras. Luego vio el escudo pontificio y nieve. Seis años después el papa Benedicto XVI falleció entre Navidad y Año Nuevo de 2022. Tras ello le dijeron que deben estar atentos a los acontecimientos, que se sucederán rápidamente.
El 3 de agosto de 2016
Vio un abeto verde adornado con bolas navideñas y cajas de regalo.
Después vio un periódico doblado y el titular “noticias de guerra”.
Vio luego una familia en una cena navideña, la cual comenzó a ver por televisión noticias de guerra. En ese momento dejaron de comer y se pusieron a rezar.
Después supo que otras personas que iban a rezar a la iglesia.
Poco después vio a mucha gente que preparaba su equipaje para dejar el lugar y buscar otro dónde vivir a causa de la guerra. Entonces le vino el pensamiento: “éxodo masivo por toda la tierra”.
Luego vio un avión dejando caer una bomba.
Finalmente sala inmensa que parecía de un palacio y en ella estaba el Papa de blanco a un lado del despacho, solo triste. Un hombre vestido de gris ingresa al recinto donde se encuentra el pontífice, cerró la puerta y supo que habían disparado al Papa.