El presidente de Bolivia Evo Morales inició su tercer mandato con una ceremonia especial en el templo de Tiahuanaco, vestido con un atuendo de evocación autóctona, confeccionado con lana de vicuña, rodeado de representantes indígenas con vestidos tradicionales.
"No planteamos un retorno al pasado, sino una recuperación para incorporarla con la modernidad", señaló, aclarando el carácter nativo del acto. "Hacemos esta ceremonia en un lugar sagrado para agradecer a los hombres y mujeres que han entregado su vida por nosotros", dijo este miércoles 21 de enero.
Entre los representantes de otros países figuró la primera vicepresidenta peruana, Marisol Espinoza.
El mandatario rindió homenaje, entre otros héroes, a Túpac Amaru y Micaela Bastidas.
Señaló que Tiahuanaco tiene un valor simbólico para los pueblos indígenas y no indígenas y es un lugar de resistencia y de lucha, por lo cual decidió elegirlo para esta fecha.
