manuel rodiguezTras batallar largos años forjando un destacado centro de evangelización en Maranga, Lima, que atrae multitudes, además de haber desarrollado múltiples obras católicas, la sentencia contra el padre Manuel Rodríguez está dictada: le despojarán de todo lo que construyó, será nadie en todas estas obras, que sus propios hermanos de orden las regalarán a la Diócesis de Lima, a cargo del arzobispo Juan Luis Cipriani.

Como se sabe, el padre Manuel Rodríguez construyó un importante centro parroquial, San Miguel Arcángel de Maranga, a donde acuden miles cada semana a sus misas de sanación, donde evangeliza a los fieles. Muchos testigos declaran curarse tras acudir a estas misas.

El padre Rodríguez pertenece a la orden de los claretianos y se mostró infatigable en su quehacer evangelizador. Fundó Telejuan 19, un canal destinado a la transmisión de programación católica, ayudado por su feligresía, que supo responder a su gran entusiasmo.

Pese a todo su gran trabajo, el padre Manuel Rodríguez sólo recibe incomprensión de parte de sus propios hermanos claretianos, orden a la cual pertenece, quienes ya hace un tiempo lo removieron del cargo de párroco del complejo parroquial de Maranga.

No contentos con ello, ahora todo lo que forjó, el complejo parroquial y el Canal Telejuan 19, lo regalarán, lo cual indica que no valoran el esfuerzo que costó al padre Manuel. El pretexto es que tienen pocas vocaciones. Pero el padre Manuel está en todas sus facultades y salud física en pleno, como para continuar por mucho años en la dirección de todo ello.

Son cinco los responsables claretianos que están tomando esta decisión. Aunque son autónomos en sus decisiones, no están tomando en cuenta a sus otros hermanos claretianos, que con toda seguridad respaldarían al padre Manuel y apostarían a que la Orden Claretiana continúe a cargo de estas obras. Tampoco toman en cuenta a las diferentes comunidades de fieles que hay en el complejo parroquial de Maranga.

De cumplirse la decisión de regalar toda la obra del padre Manuel Rodríguez, simplemente le podrán decir que salga del complejo parroquial de Maranga y que se vaya a cualquier otro punto del país.

Si ello ocurre, el futuro de su misión en Lima terminaría, pues en la ciudad no hay otro sacerdote que atraiga multitudes a una misa de sanación. También podrán retirar al padre Manuel de Telejuan 19.

La feligresía de Maranga se encuentra extremadamente preocupada por esta posibilidad y piden a los católicos escribir a los padres claretianos responsables superiores del padre Manuel reflexionar y reconsiderar su decisión, según informaron a Con Nuestro Perú. Para ello indican sus correos electrónicos:

P. José María Abella, Superior General de los Misioneros Claretianos: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
P. Juan Carlos Bartra, Superior Provincial de la Provincia Claretiana Perú-Bolivia: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
P. José Antonio Alvarez de Prado, Vicario Provincial: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
P. Benito García Ramos, Prefecto de Apostolado: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
P. Ronel Chipana, Ecónomo y Director del Colegio Claretiano: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Los fieles de Maranga indican: “como laico católico tienes el derecho y el deber de participar activamente en la marcha de la Iglesia con tu sincera opinión”.

Sin duda, el Arzobispado de Lima, a cargo del cardenal Juan Luis Cipriani, no tendría el mismo carisma para conducir estas obras, que quedarían en nada.

Si hay escasez de vocaciones en la Orden Claretiana, debería ser un motivo de vergüenza para los cinco sacerdotes claretianos mencionados. Mientras el padre Manuel entregaba alma y cuerpo en su obra, ¿qué hacían ellos para formar nuevos claretianos, teniendo a tan destacado representante, como él?

Sin duda, muchos jóvenes hubiesen querido ser continuadores del padre Manuel aspirando a tener un carisma como el suyo. No sólo eso. Por su carisma relacionado fuertemente con colegios y jóvenes, los claretianos podrían haber llamado a la vocación ha muchos. ¿Cómo han sido incapaces de interesar a los aspirantes teniendo todo lo que tienen? ¿No querían invitar a los jóvenes a la vocación a la continuidad para no tener que mencionar al padre Manuel? ¿Fueron celos contra la figura de este padre? Esta situación es muy extraña y deja mucho que desear.