En el diario limeño La República del 2 de abril de este año, con el título “¿Pura grosería?”, se lee en la columna de Mirko Lauer:

Está claro que esta vez las mujeres en campaña se están comportando mucho mejor que los hombres. Pero el ser blanco de puyas y gestos destemplados viene parejamente repartido entre los géneros. Los medios han elevado estos incidentes casi a la altura de encrucijadas electorales decisivas, como buscando una política de guante blanco.

Comentario

Las “puyas” son plantas bromeliáceas, como la puya Raimondi. También son objetos afilados. Cuando se trata de dichos picantes, agudos u ofensivos se debe emplear el sustantivo pulla.

Podemos decir por ejemplo:

Está claro que esta vez las mujeres en campaña se están comportando mucho mejor que los hombres. Pero el ser blanco de pullas y gestos destemplados viene parejamente repartido entre los géneros. Los medios han elevado estos incidentes casi a la altura de encrucijadas electorales decisivas, como buscando una política de guante blanco.