El Gobierno persa denuncia la campaña propagandística sobre las protestas recientemente acaecidas en Irán lanzada por algunos medios de comunicación del Reino Unido, con la que se trata de ‘incitar a los manifestantes a causar disturbios’.

“Algunos de los medios de comunicación en lengua persa que tienen su sede en el Reino Unido han tratado de incitar a los manifestantes a recurrir a disturbios y enfrentamientos armados, en violación explícita tanto de las leyes nacionales británicas como del derecho internacional”, se lee en una carta enviada el jueves por la embajada de Irán en Londres a Ofcom, el regulador británico la industria de las telecomunicaciones.

La embajada iraní pide a Ofcom en su mensaje, según la información facilitada por una fuente diplomática persa, que “ponga fin a las perniciosas prácticas” de los mencionados medios y, de este modo, “proteja los principios de la radiodifusión profesional”.

Las protestas y los actos de violencia cometidos en algunas de ellas ha hecho que el país asiático haya entrado estos días en los titulares comunes de los medios de comunicación internacionales y redes sociales.

No obstante, no todos los medios y redes han ofrecido un reflejo fidedigno de las manifestaciones, lo que se hace evidente en los casos de imágenes y vídeos publicados procedentes en realidad de otros lugares, en lugar de Irán.

Por otra parte, el embajador de Irán en Londres, Hamid Baidineyad, tuiteó el mismo jueves un mensaje en el que destacaba que “todos han hablado de los aspectos negativos de las protestas callejeras en Irán”, sin hacer referencia al hecho de que la mayoría del pueblo persa “no ha respaldado” los actos de violencia.

Las autoridades iraníes han señalado una y otra vez que los disturbios fueron orquestados desde el extranjero; en concreto, desde EE.UU., el régimen israelí y Arabia Saudí.

En esta línea, el hoyatoleslam Mohamad Yafar Montazeri, fiscal general de Irán, informó ayer jueves de que el principal promotor del reciente caos en Irán fue Michael D'Andrea, un exagente antiterrorista de la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU (CIA, por sus siglas en inglés).