Al igual que la corrupcion y la inseguridad ciudadana

Mg CPCC Luis Alberto Latínez Carpio*

Los  peruanos queremos a nuestro país y estamos identificados con él, pero existen grandes problemas que nos afectan, como son la corrupción y la inseguridad ciudadana. Otro gran problema que nos afecta y que no es percibido por la mayoría de ciudadanos, es la evasión tributaria.

Personalmente y muchos peruanos queremos dejarle a las nuevas generaciones un país libre de estos flagelos.

La evasión tributaria son los tributos que no pagan las empresas y las personas naturales, lo cual perjudica a nuestro país, porque dejamos de percibir grandes cantidades de dinero, los mismos que pueden ser utilizados para mejorar, entre otros, la educación pública, implementar y ampliar la red hospitalaria, mejorar la infraestructura terrestre, educativa y hospitalaria.  

La evasión tributaria se da en todos los tributos: Impuesto a la renta (Renta de 1era, 2da,  3era, 4ta  y 5ta categoría), IGV, SENATI, ONP, ESSALUD, etc.

La erradicación de la evasión tributaria en nuestro país (50 % del total que se recauda por tributos) que es una de las más altas de Indoamerica (América Latina), es responsabilidad de la SUNAT, tal como se establece en el Código Tributario (numeral 14 del artículo 62.º):

Artículo 62º.- Facultad de Fiscalización                                                                                                      

14. Dictar las medidas para erradicar la evasión tributaria

Esta obligación de la SUNAT,  no se viene cumpliendo, y más bien la evasión tributaria se viene incrementando.

Siempre he manifestado que una manera de medir la eficacia en la gestión de la SUNAT  es bajando la evasión tributaria.

No puedo dejar de mencionar que la SUNAT ha implementado algunas medidas para erradicar la evasión tributaria: la Retención del IGV,  la Percepción del IGV, el Sistema de Detracciones, Registro de Ventas y Compras electrónicos y están implementando progresivamente los comprobantes de pago electrónicos (Facturas, Boletas de Ventas, notas de debito y Notas de Crédito); pero estas son ínfimas, porque la evasión tributaria en lugar de disminuir continua incrementándose.

Lo que le ha faltado a la SUNAT es fiscalizar todos los tributos que administra y recauda de personas jurídicas y personas naturales. Sobre todo  el impuesto a la renta e IGV de las grandes empresas. 

Hay que tener presente que al concluir el 2do gobierno de Alan García la SUNAT tenía aproximadamente 7,000 trabajadores, los mismos que se incrementaron en el gobierno de Ollanta Humala a 14,000 trabajadores. Este incremento excesivo de personal no redujo la evasión tributaria, porque ingreso personal sin experiencia en fiscalización tributaria (hasta chef están fiscalizando), los mismos que eran capacitados en periodos muy cortos.

Si queremos mejorar el accionar de la SUNAT, sobre todo en la fiscalización tributaria para reducir a su mínima expresión la evasión tributaria, tienen que convocar personal provenientes de las Facultades de Contabilidad de las distintas universidades,

porque los estudiantes de contabilidad son los que más relacionados están con los tributos.

Al incumplimiento de erradicar la evasión tributaria por parte de la SUNAT, se agrega la caída de la recaudación tributaria y de la presión tributaria (13 %).

Teniendo en cuenta el deficiente accionar de la SUNAT,  es necesario que se reorganice dicha institución.

El Superintendente actual de la SUNAT es el ingeniero Víctor Paul Shiguiyama Kovashigawa, quien está vinculado al fujimorismo, pues fue regidor municipal del movimiento Cambio 90- Nueva Mayoría y asesor de Keiko Fujimori en la campaña presidencial 2011.

*Asesor y consultor de empresas

  • Especialista en tributación y auditoria
  • Presidente del Centro de Investigaciones Contables y Tributarios
  • Past-Decano del Colegio de Contadores Público de Lima (CCPL)2007-2009
  • Past-Director de Defensa Profesional del CCPL 2001-2003
  • Ex-Jefe SUNAT
  • Ex-Presidente del Instituto de Administración Tributaria (IAT)