El senador republicano estadounidense, Lindsey Graham, asegura que 2018 será un año de peligros extremos con respecto al enfrentamiento entre EE.UU. y Corea del Norte sobre misiles balísticos y programa de armas nucleares de Pyongyang.

“2018 será un año de oportunidades y peligro extremo (…) 2018 va a ser el año para negar a Corea del Norte la capacidad de golpear a la patria”, dijo el lunes Graham en declaraciones concedidas a la cadena estadounidense CBS News.

El senador estadounidense también predijo que existe una posibilidad de 70 por ciento de que Washington emprenda acciones militares contra Pyongyang en los próximos 12 meses si el país liderado por Kim Jong-un realiza una séptima prueba nuclear.

De igual manera, sostuvo que el presidente de EE.UU., Donald Trump, debe presionar a Corea del Norte, incluso a través de amenazas de acción militar para impedir que este desarrolle armas nucleares.

Conforme a Graham, las sanciones nunca funcionarán únicamente y “una creíble fuerza militar” es la única forma en que el inquilino de la Casa Blanca podría obligar a Corea del Norte a abandonar sus programas de armas.

Mientras Washington no deja su política de amenaza militar en medio de la escalada de tensión en la península coreana, Jonathan Wachtel, el exportavoz de la misión estadounidense ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), advirtió que en caso de una guerra, el líder norcoreano será la primera víctima.

A su vez, Kim Jong-un, recalcó en su discurso de Año Nuevo que tiene el botón nuclear en su despacho, y reiteró que los misiles norcoreanos tienen bajo su alcance a todo el territorio de Estados Unidos.

Pyongyang insiste en que sus pruebas nucleares y balísticas están amparadas por su “derecho a la autodefensa” ante la “hostilidad” de EE.UU., manifiesta en las maniobras militares conjuntas Washington-Seúl en la península de Corea.

01.01.2018