Cobarde actitud de Municipalidad de Lima: culpan a vecinos de Barranco por atrasos en Metropolitano


Por Juan Sheput


Si desean conocer una muestra de cuál es el temperamento ante los problemas del señor Luis Castañeda Lossio fíjense en dos puntos nada más: primero, enjuicia a un grupo de vecinos de Barranco por protestar porque el alcalde con su Metropolitano les ha arruinado la vida y, segundo, cobardemente, para justificar el retraso en la ejecución de las obras les echa la culpa a los mismos vecinos. No es la primera vez que se posterga la inauguración. Estaba anunciado para octubre del 2009, luego para la fiesta de Lima, posteriormente para abril ¿a eso se llama planificar? Y encima enjuicia a los vecinos barranquinos.


Aparentemente se pone nervioso ràpidamente el alcalde, nos preguntamos ¿así quiere ser presidente del Perú?

Luis Castañeda Lossio ha demostrado gran incapacidad para el cargo. Se sostiene gracias al conjunto de abogados sin ética que apelan a leguleyadas para superar los problemas que lo embargan. Y también se sostiene gracias a una red mediática que vaya usted a saber por qué razones lo protegen. La forma como La República blinda a Castañeda es un ejemplo de cómo uno puede ser ineficiente, incapaz, tener indicios de corrupción y sin embargo gozar de "buena prensa".

Es de gran cobardía política trasladar la culpa de su propia ineficiencia a los vecinos de Barranco. Decir que por culpa de los vecinos no se puede inaugurar esta obra sobrevalorada e inútil es un acto desesperado. La realidad pareciera ser otra. La obra cuesta mucho más de lo que se presupuestó inicialmente, no tiene estudios de impacto ambiental, no hay planificación, hay indicios de gran corrupción y se teme, mucho, que cuando se inaugure, la ciudad se de cuenta de que el esfuerzo y el sacrificio ha sido en vano, que el Metropolitano no sirve para nada, que es toda una estafa para la población.

El Metropolitano ha destruido la calma y el vecindario en Barranco. Igual ha hecho con Chorrillos y buena parte de Lima Norte. Es una obra que, al igual que el Tren Eléctrico, no serviràn para solucionar el monstruoso sistema de transporte cuyo caos es responsabilidad del alcalde de Lima Luis Castañeda Lossio.