Beatriz Merino renuncia a la Defensoría del Pueblobeatriz_merino_4

Agradeció al Congreso anterior que en el 2005 la designó como Defensora del Pueblo y a la ciudadanía por honrarla con su legitimidad y respeto.  Señaló al Presidente del Congreso que esperó un lapso prudencial  de tiempo para la elección de su sucesor o sucesora.

Beatriz Merino renunció a su cargo explicando  que al término de su mandato constitucional y en vista de que no se produce la elección del Defensor o Defensora del  Pueblo, la doctora Beatriz Merino  presenta su renuncia irrevocable,  por motivos personales, al cargo de Defensora del Pueblo, mediante un oficio dirigido al Presidente del Congreso de la República, César Zumaeta. 

En el texto del referido oficio, Beatriz Merino explica que el 15 de noviembre pasado se cumplió el plazo constitucional de su mandato y que, habiendo esperado un tiempo prudencial decidió presentar su renuncia formal en vista de que el Congreso de la República no ha elegido a su sucesor o sucesora.
 
Agrega que, de acuerdo con el Artículo 8 de la Ley Orgánica de esta institución, ha encargado las funciones de Defensor del Pueblo al doctor Eduardo Ernesto Vega Luna, Primer Adjunto a la Defensora del Pueblo, quien las asumirá a partir desde el 1.° de abril hasta que el  Congreso de la República designe al nuevo titular y éste asuma sus funciones.

Al referirse a la labor de Vega Luna, funcionario de carrera de la Defensoría del Pueblo, desde hace 14 años, destaca  su amplia trayectoria profesional y académica, en la defensa y promoción de los derechos humanos en el país. 

Tras expresar su agradecimiento al Congreso de  la República por la designación con que la honró en el 2005 y por el apoyo que recibió en el curso de su gestión, la doctora Merino resalta el trabajo de los funcionarios y funcionarias, así como de los servidores y servidoras de la Defensoría del Pueblo en todo el país.

“Ciertamente, en este esfuerzo no he estado sola. He recibido la constante colaboración de un brillante equipo de profesionales que, en su gran mayoría, cumplen una línea de carrera en la institución, a la que han aportado lo mejor de sus energías, el mayor de sus talentos y el más cabal de sus compromisos con los supremos principios y valores que orientan nuestra vida en sociedad”, sostiene. 

Finalmente, Beatriz Merino expresa en la referida misiva su sincera y especial gratitud a cada uno de los peruanos y peruanas, niños y adultos del país, por el firme respaldo recibido durante su gestión, el cual se ha evidenciado, inclusive, en generosos comentarios incorporados en columnas, artículos y editoriales periodísticos que han sido publicados en diversos medios de comunicación.

Al referirse específicamente a este apoyo, la doctora Merino afirma que ello la compromete a perseverar, desde la posición en que se encuentre, “en apoyar el proceso inacabado de construir una cultura de paz, tolerancia y solidaridad”.